L D (EFE) "Muchos de ustedes tienen pasados ligados a la diplomacia y la política, un pasado muy diferente a la carrera en el mundo del espionaje. Y supongo que los viejos espías tienen una forma peculiar de hablar", dijo Gates al auditorio. "Pero yo, estuve en un campo de reeducación", agregó el jefe del Pentágono, con un pasado ligado a la CIA, provocando las risas de los asistentes a la Conferencia.
"Estuve en un campo de reeducación. Fui cuatro años y medio presidente universitario y ya se sabe que en esa posición sólo hay dos opciones: eres amable y te quedas, o desagradable y te vas". Putin acusó a Washington de querer imponer un mundo "unipolar", de llevar a cabo acciones unilaterales al margen de la legalidad internacional y de planear una "militarización" del espacio que tendría consecuencias y acciones contrarias a la no proliferación.
El presidente ruso hizo extensivas sus críticas a la OTAN, a la que acusó de ampliarse de forma amenazante hasta sus fronteras. El secretario general de la Alianza Atlántica, Jaap de Hoop Scheffer, se declaró "decepcionado" por el discurso de Putin, propio de la confrontación en los años de la Guerra Fría, al que también respondió la Casa Blanca.
Robert Gates, en la Conferencia de Munich
Gates afirmó en la Conferencia de Seguridad de Múnich que el arma más efectiva contra las amenazas del mundo globalizado, entre ellas el terrorismo, es la relación transatlántica. "La alianza transatlántica, la fortaleza de los valores que compartimos es nuestra mejor defensa en un mundo cada vez más complejo", dijo Gates, que hizo un repaso de la trayectoria de la OTAN y de las misiones multilaterales.
En una referencia a Afganistán, repitió que la ofensiva de primavera "será nuestra ofensiva", y abogó por una estrategia global que "nos permita terminar el trabajo comenzado". Recordó que para aplicar esa estrategia hace falta dinero y en ese sentido dijo que le resulta difícil comprender cómo los países más ricos del planeta, miembros de la OTAN, son incapaces de movilizar los recursos necesarios. El jefe del Pentágono fue el primer orador de la segunda y última jornada de la Conferencia de Seguridad de Múnich, a la que también asiste el jefe negociador iraní para la cuestión nuclear, Ali Lariyani.
En una referencia a Afganistán, repitió que la ofensiva de primavera "será nuestra ofensiva", y abogó por una estrategia global que "nos permita terminar el trabajo comenzado". Recordó que para aplicar esa estrategia hace falta dinero y en ese sentido dijo que le resulta difícil comprender cómo los países más ricos del planeta, miembros de la OTAN, son incapaces de movilizar los recursos necesarios. El jefe del Pentágono fue el primer orador de la segunda y última jornada de la Conferencia de Seguridad de Múnich, a la que también asiste el jefe negociador iraní para la cuestión nuclear, Ali Lariyani.