LD (Agencias)
En declaraciones al periodista Andres Oppenheimer del diario estadounidense
The Miami Herald
, Felipe González consideró que “algo raro está pasando en Cuba”, tal vez “un factor político”, tras las fallas de seguridad que permitieron los recientes secuestros de embarcaciones de pasajeros en la isla. “Un secuestro es posible, pero dos o tres acciones en pocos días supone que o bien hay un fallo del aparato de seguridad, inconcebible conociendo a Cuba, o bien hay algún elemento interno que cree situaciones de dificultad”.
Respecto a los recientes discursos y la ola represiva desatada por el dictador cubano, González señaló desde Buenos Aires que “Fidel está patético. Ya está como Franco cuando se estaba muriendo”. En ese sentido, opinó que la transición a la democracia en Cuba será pacífica y no será “muy dramática” porque “la generación de los duros recíprocos es una generación que ya está afuera. En la parte donde vives (Miami), ni siquiera los hijos de `los duros de la película' son duros como sus padres. Y en Cuba, la generación que tiene 40, 45 ó 50 años, que tiene un horizonte de veinte años por delante, ésos van a pactar, como lo hicieron en España”.
Oppenheimer cuestiona al ex mandatario español: “¿pero cómo se van a controlar los rencores de tanta gente que fue reprimida por el régimen durante tantos años?”. Como respuesta, González explica que “hay dos tipos de rencores: los viejos rencores, que son a muerte y para siempre, y los nuevos rencores, que se administran mejor. Yo no tenía mucha dificultad en entenderme con Adolfo Suárez. El venía del régimen, yo de en contra del régimen, y nos llevábamos. Sin embargo, (el ex líder comunista) Santiago Carrillo y Franco nunca pudieron superar esa cosa profunda que los separaba”. Por ello, manejó que en Cuba “no va a haber un río de sangre para repartirse nada, sino un acuerdo, mezcla de oportunismo y de interés, que no está nada mal, un acuerdo que va a permitir convivir”.
Respecto a los recientes discursos y la ola represiva desatada por el dictador cubano, González señaló desde Buenos Aires que “Fidel está patético. Ya está como Franco cuando se estaba muriendo”. En ese sentido, opinó que la transición a la democracia en Cuba será pacífica y no será “muy dramática” porque “la generación de los duros recíprocos es una generación que ya está afuera. En la parte donde vives (Miami), ni siquiera los hijos de `los duros de la película' son duros como sus padres. Y en Cuba, la generación que tiene 40, 45 ó 50 años, que tiene un horizonte de veinte años por delante, ésos van a pactar, como lo hicieron en España”.
Oppenheimer cuestiona al ex mandatario español: “¿pero cómo se van a controlar los rencores de tanta gente que fue reprimida por el régimen durante tantos años?”. Como respuesta, González explica que “hay dos tipos de rencores: los viejos rencores, que son a muerte y para siempre, y los nuevos rencores, que se administran mejor. Yo no tenía mucha dificultad en entenderme con Adolfo Suárez. El venía del régimen, yo de en contra del régimen, y nos llevábamos. Sin embargo, (el ex líder comunista) Santiago Carrillo y Franco nunca pudieron superar esa cosa profunda que los separaba”. Por ello, manejó que en Cuba “no va a haber un río de sangre para repartirse nada, sino un acuerdo, mezcla de oportunismo y de interés, que no está nada mal, un acuerdo que va a permitir convivir”.
