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MUSHARRAF ORDENA "ACTUAR CON FIRMEZA"

Los disturbios en Pakistán tras el asesinato de Bhutto provocan al menos 38 muertos

La ola de violencia desatada en Pakistán tras el atentado contra Benazir Bhutto se ha saldado ya con la muerte de al menos 38 personas. La provincia donde se registran mayores conflictos, con saqueos de comercios, bancos y gasolineras, es Sindh, en el sudeste de Pakistán. Musharraf ha ordenado a las fuerzas de seguridad "actuar con firmeza" para contener los enfrentamientos. Aunque según el Gobierno la intervención del Ejército será el "último recurso", ya hay tropas desplegadas en toda la provincia.



La ola de violencia desatada en Pakistán tras el atentado contra Benazir Bhutto se ha saldado ya con la muerte de al menos 38 personas. La provincia donde se registran mayores conflictos, con saqueos de comercios, bancos y gasolineras, es Sindh, en el sudeste de Pakistán. Musharraf ha ordenado a las fuerzas de seguridad "actuar con firmeza" para contener los enfrentamientos. Aunque según el Gobierno la intervención del Ejército será el "último recurso", ya hay tropas desplegadas en toda la provincia.
L D (EFE) En rueda de prensa, el portavoz de Interior, Javed Iqbal Cheema, aseguró que la ola de violencia ha causado pérdidas millonarias en propiedades destrozadas por los manifestantes, aunque calificó de "satisfactoria" la situación global de seguridad en el país.

"Los delincuentes se están aprovechando de la tensa situación" generada por la muerte de Bhutto, consideró el portavoz, quien detalló que 174 bancos, 34 gasolineras, 765 comercios y 72 vagones de tren han sido incendiados en los disturbios registrados por todo el país.

Sus cifras contrastan, no obstante, con las ofrecidas poco antes por el ministerio del Interior de la provincia de Sindh, que cifró en 44 los muertos sólo en esa región, y en 13 bancos, 27 gasolineras y 600 vehículos los incendiados en la sureña ciudad de Karachi.

Los disturbios mantienen aislada Sindh del resto del país, con todas las líneas de ferrocarriles cortadas, las tiendas y gasolineras cerradas y constantes brotes de violencia en sus calles, según los canales privados de televisión paquistaníes. La empresa nacional de ferrocarriles reclamó hoy al Ejército y los "rangers" o paramilitares que desplieguen a sus tropas para proteger las vías férreas.

Aunque el Ejército ha sido desplegado en todo Sindh y los "rangers" en las principales ciudades de la provincia noroccidental del Punjab, Cheema dijo que la intervención de las tropas será "el último recurso" para mantener el orden.
Instrucciones para actuar "con firmeza"

Poco antes, el presidente del país, Pervez Musharraf, había presidido una reunión con altos cargos del Gobierno y responsables del Ejército y los cuerpos de seguridad, a los que ordenó actuar "con firmeza" para restablecer el orden en el país.

Musharraf dio esas instrucciones durante una reunión con altos cargos políticos y responsables de los cuerpos de seguridad, a quienes pidió que se protejan las instalaciones vitales del Gobierno y se restablezca el orden en las calles, según la agencia estatal APP.

El presidente instó a "lidiar con firmeza con aquellos elementos que quieren aprovecharse de la situación lanzándose al pillaje y el saqueo" y a tomar todas las medidas necesarias para "garantizar la seguridad del pueblo".

Según Musharraf, "no se puede permitir que malhechores y elementos antisociales" que actúan "bajo la apariencia de protestas" políticas "dañen las vidas y propiedades del ciudadano de a pie".

Tras mencionar los problemas de abastecimiento que hay en algunas partes del país por el cierre de comercios y gasolineras "debido al temor a los vándalos y saqueadores", Musharraf ordenó a las fuerzas de seguridad que tomen "seria nota y aseguren un pronto retorno a la normalidad" en el país, para que se acaben "los sufrimientos del ciudadano de a pie".

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