L D (EFE)
Una segunda periodista resultó herida de un disparo y va a ser repatriada en las próximas horas a Portugal mientras que un tercero, un cámara de televisión SIC, resultó ileso en el incidente. Otros seis periodistas lusos, que viajaban en otros dos vehículos junto al de los anteriores, consiguieron escapar.
Todos ellos están ahora en el acuartelamiento de Basora puesto por los británicos a disposición de un contingente de 129 agentes de la Guardia Nacional Republicana (GNR) lusa, de cuyo despliegue iban a informar los mencionados reporteros.
Agentes de la GNR y periodistas viajaron juntos desde Lisboa a Kuwait el pasado día 12. El contingente portugués debía desplegarse en Nasiriya, la ciudad de mayoría chií en la que esta misma semana un atentado contra la sede de los carabineros italianos causó una matanza. Precisamente los guardias portugueses se iban a reunir con sus colegas italianos, pero tras el atentado fueron alojados en un acuartelamiento británico de Basora, donde llegaron el día 13 por la noche, mientras que los periodistas viajaron este viernes formando un convoy, que fue asaltado por los ocupantes de dos coches iraquíes.
El asalto se produjo cerca de la localidad de Mardid, a escasos kilómetros de la frontera de Kuwait, considerada una de las zonas más violentas de Irak, donde las fuerzas de la coalición no consiguen imponer el orden. Además, el de este viernes fue el segundo incidente sufrido por periodistas lusos en Irak en el plazo de dos días, después de que el jueves un enviado especial de la emisora pública RDP, José Manuel Rosendo, fuese asaltado entre Nasiriya y Basora.
Todos ellos están ahora en el acuartelamiento de Basora puesto por los británicos a disposición de un contingente de 129 agentes de la Guardia Nacional Republicana (GNR) lusa, de cuyo despliegue iban a informar los mencionados reporteros.
Agentes de la GNR y periodistas viajaron juntos desde Lisboa a Kuwait el pasado día 12. El contingente portugués debía desplegarse en Nasiriya, la ciudad de mayoría chií en la que esta misma semana un atentado contra la sede de los carabineros italianos causó una matanza. Precisamente los guardias portugueses se iban a reunir con sus colegas italianos, pero tras el atentado fueron alojados en un acuartelamiento británico de Basora, donde llegaron el día 13 por la noche, mientras que los periodistas viajaron este viernes formando un convoy, que fue asaltado por los ocupantes de dos coches iraquíes.
El asalto se produjo cerca de la localidad de Mardid, a escasos kilómetros de la frontera de Kuwait, considerada una de las zonas más violentas de Irak, donde las fuerzas de la coalición no consiguen imponer el orden. Además, el de este viernes fue el segundo incidente sufrido por periodistas lusos en Irak en el plazo de dos días, después de que el jueves un enviado especial de la emisora pública RDP, José Manuel Rosendo, fuese asaltado entre Nasiriya y Basora.
