L D (EFE) Según los periodistas iraníes que han podido seguir los acontecimientos, numerosas personas desfilaron de forma pacífica por la avenida Valy-e Asr, principal arteria de la ciudad, en dirección hacia la plaza de Vanak, en el norte de la capital. Los testigos afirman que, como el lunes, la cola se extendía varios kilómetros.
Casi en silencio, levantaban los brazos y hacían el signo de la victoria, mientras portaban folios blancos con el nombre del candidato reformista que ha denunciado fraude en los comicios del pasado viernes.
La manifestación, que no había sido autorizada, no ha podido ser seguida por la prensa internacional, a la que hoy el ministerio de Orientación y Guía Islámica canceló los permisos para informar en la calle y les advirtió que no pueden cubrir eventos que no cuenten con una autorización especial.
La marcha sólo se puede seguir por las imágenes que proporciona la televisión nacional iraní. La cadena, controlada por el líder supremo de la Revolución, ayatolá Ali Jameneí, calificó la marcha de "concentración por la unidad" y aseguró que en ella han participado miles de personas procedentes "de todos los estratos de la sociedad".
Sin embargo, durante la retransmisión televisiva apenas se han mostrado planos cortos que pudieran permitir conocer cuál era el verdadero ambiente en la plaza de Valy-e Asr, situada en el centro de Teherán y epicentro de la marcha.
