L D (EFE)
Dos soldados estadounidenses murieron y otros trece resultaron heridos en un ataque de la resistencia armada iraquí en Bagdad, informaron fuentes militares norteamericanas. Este es el primer ataque mortal contra EEUU después del que el pasado jueves causó la muerte de tres soldados de EEUU cerca de la ciudad de Tikrit, a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad.
Horas después se conocía la muerte de otro soldado estadounidense en un ataque en un área situada al oeste de Bagdad. Según fuentes militares norteamericanas, tuvo lugar en la noche del sábado al domingo en una carretera de la ciudad de Ramadi, a unos 70 kilómetros de la capital, cuando un artefacto explosivo estalló al paso de una patrulla estadounidense.
Se trata de los primeros ataques mortíferos desde el que causó la muerte de tres soldados de EEUU el pasado jueves cerca de la ciudad de Tikrit, a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad. Con las nuevas muertes son ya 79 los militares estadounidenses que han perdido la vida desde que Washington anunció el fin de la guerra en Irak, el pasado 1 de mayo.
Los ataques se han concentrado, además de la capital, en las ciudades de Tikrit, Ramadi, Faluya y Balad, cuyos habitantes son, en su mayoría, musulmanes suníes.
Horas después se conocía la muerte de otro soldado estadounidense en un ataque en un área situada al oeste de Bagdad. Según fuentes militares norteamericanas, tuvo lugar en la noche del sábado al domingo en una carretera de la ciudad de Ramadi, a unos 70 kilómetros de la capital, cuando un artefacto explosivo estalló al paso de una patrulla estadounidense.
Se trata de los primeros ataques mortíferos desde el que causó la muerte de tres soldados de EEUU el pasado jueves cerca de la ciudad de Tikrit, a unos 170 kilómetros al norte de Bagdad. Con las nuevas muertes son ya 79 los militares estadounidenses que han perdido la vida desde que Washington anunció el fin de la guerra en Irak, el pasado 1 de mayo.
Los ataques se han concentrado, además de la capital, en las ciudades de Tikrit, Ramadi, Faluya y Balad, cuyos habitantes son, en su mayoría, musulmanes suníes.