
L D (Agencias) Este sábado, el presidente paquistaní amenazó con matar a los terroristas si no se rinden aunque planteó la posibilidad de mantener sitiada la mezquita durante largo tiempo para evitar un asalto que se cobre víctimas entre las mujeres y niños que hay en su interior. En estos momentos, miles de soldados mantienen rodeado el templo y el seminario femenino adjunto pero hasta ahora han obtenido pocos resultados. Sólo han ido destruyendo los muros del recinto y ocupando posiciones estratégicas para su asalto.
La crisis de la mezquita, un gran complejo ubicado en una céntrica zona comercial próxima a los barrios diplomático y gubernamental, ha paralizado la vida en Islamabad. Cada día, el Gobierno levanta durante unas horas el toque de queda impuesto en la zona sitiada para dar un respiro a los habitantes. Durante la madrugada de este domingo se han podido escuchar disparos de arma y explosiones que cesaron al amanecer.
Musharraf explicó que sus hombres han mostrado contención para garantizar la seguridad de las mujeres y niños que se encuentran presuntamente retenidos por el líder religiosa de la mezquita, Abdul Rashid Ghazi.
Por su parte, Ghazi ha asegurado que él y sus seguidores prefieren el martirio a la rendición pedida por el Gobierno. Además, sostiene que las personas que se encuentran en el interior de la mezquita lo hacen por su propia voluntad. Las autoridades paquistaníes aseguran que sólo han muerto veinticuatro personas desde que comenzó el asedio. Sin embargo, la cadena de televisión local Geo TV informó, citando fuentes sin identificar del interior de la mezquita, que 305 hombres y mujeres han perdido la vida. Ningún periodista tiene acceso a su interior
