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DIFUNDEN UN VÍDEO CON EL ASESINATO DE UN CIVIL BÚLGARO

Policías iraquíes encuentran los cadáveres de 19 agentes que habían sido secuestrados hace seis días

La Policía iraquí halló los cadáveres de 19 de sus agentes en un área desértica cercana a la ciudad de Beiji, a unos doscientos kilómetros al norte de Bagdad. Los uniformados habían sido secuestrados hace seis días. El macabro hallazgo tiene lugar después de que fuera difundido un vídeo en el que se muestra con crudeza el asesinato de un extranjero que resultó herido tras el derribo de un helicóptero civil en el que viajaba.

LD (EFE) Los cadáveres de 19 policías iraquíes han sido localizados por agentes en una zona desértica cercana a la ciudad de Beiji. Las víctimas fueron secuestrados en esa zona hace seis días y sus cuerpos presentaban signos de violencia. La localidad está en el interior del denominado "triángulo suní", una región que se extiende al oeste y norte de Bagdad y es considerada el escenario principal de los grupos terroristas.
 
Según la Policía local, todos los cadáveres presentaban signos de haber sido acribillados a corta distancia con ráfagas de metralletas. Los cuerpos han sido trasladados al hospital general de la vecina localidad de Tikrit, cuna del depuesto dictador iraquí Sadam Husein.
 
El macabro hallazgo tiene lugar horas después de que terroristas del "Ejército Islámico en Irak", que se atribuyeron el derribo de un helicóptero civil búlgaro en el que murieron once personas, seis de ellas civiles estadounidenses, difundieran dos vídeos en los que se muestra con crudeza cómo asesinan a sangre fría a uno de los heridos en el ataque.
 
En el primer vídeo, grabado con mano temblorosa por uno de los atacantes, y entre gritos de "¡Alá es grande!" pronunciados por los presentes, se muestran los restos calcinados del helicóptero y el cadáver también quemado de uno de los ocupantes del aparato.
 
El segundo vídeo se recrea en los restos desmembrados de otra de las víctimas y, segundos después, el camarógrafo se acerca hasta unos matojos en medio de los cuales yace una persona herida que implora ayuda. El herido, aparentemente un miembro de la tripulación búlgara, alto y fornido y vestido con un mono azul y guantes, pide al camarógrafo que le ayude a levantarse, extendiendo las manos hacia arriba y repitiendo en inglés: "¡Dame la mano!".
 
Las imágenes muestran como alguien le ayuda a incorporarse. Acto seguido, uno de los atacantes le grita que camine y que levante las manos, tras lo cual le dispara a quemarropa, causándole la muerte, entre los gritos de júbilo de los presentes, que corean otra vez "¡Alá es grande!".

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