
LD (EFE) Cinco personas han muerto, entre ellas dos civiles, por un nuevo atentado terrorista, el undécimo que se ha registrado en Pakistán durante la presente semana. El criminal, un suicida, hizo explotar una bomba contra un puesto militar de la zona de Miran Shah, en la región de Waziristán del Norte, cerca de la frontera con Afganistán.
Miran Shah ha sido escenario de tres de los once atentados ocurridos en Pakistán en los últimos siete días, en los que ha muerto centenar y medio de personas, la mayoría miembros de las fuerzas de seguridad.
Fuentes de la Policía local han indicado que el último atentado, como los anteriores, es un acto de venganza por el asalto militar de la semana pasada a la Mezquita Roja de Islamabad, donde se habían atrincherado cientos de islamistas radicales. Entre los muertos en la mezquita se encontraba el clérigo Abdul Rasheed Ghazi, que pidió a sus seguidores que continuaran con su "misión" en Pakistán: la "yihad" contra el régimen del presidente Pervez Musharraf.
