
L D (EFE)
Para que Yuschenko pueda ser investido presidente, ceremonia que su equipo deseaba celebrar esta misma semana, los resultados definitivos de los comicios deben ser publicados en la prensa oficial en el transcurso de tres días.
Por eso Yanukovich anunció su intención de interponer este miércoles un recurso ante el Supremo para impugnar esos resultados, para lo cual este martes presentó a ese tribunal una petición formal de aplazar la publicación oficial, que inmediatamente fue satisfecha. El presidente de la CEC, Yaroslav Davidovich, consideró "correcto y democrático" que el perdedor de la comicios pueda recurrir los resultados ante el Supremo y confirmó que la Comisión no publicará esos datos hasta que la Corte no decida sobre la queja presentada.
Por otra parte, recordó que el Supremo ya desestimó todos los recursos presentados hasta ahora por Yanukovich y señaló que la CEC está dispuesta a defender ante los magistrados su resolución, por la que ayer proclamó como presidente electo al líder opositor. Davidovich aseguró que esa resolución es "legal al cien por cien" y que la reunión de la CEC la víspera se celebró "respetando todos los aspectos formales, jurídicos y de procedimiento, por primera vez en los últimos 8 años".
La anterior composición de la CEC había proclamado a Yanukóvich como ganador de la segunda vuelta electoral del 21 de noviembre, que el Supremo y el Parlamento invalidaron por fraude masivo y ordenaron repetir el 26 de diciembre, cuando ganó Yuschenko. En sus recursos, Yanukovich intenta descalificar los comicios con el argumento de que los cambios en la ley electoral adoptados por el Legislativo para garantizar la limpieza de la nueva cita con las urnas tras la anterior fraudulenta habían afectado al derecho de los ancianos y minusválidos de votar a domicilio.
El voto a domicilio, junto con los boletines para votar de forma anticipada o fuera de la circunscripción de residencia, fueron el principal instrumento de fraude en la segunda ronda de las elecciones presidenciales. La revisión de la ley electoral para abortar la posibilidad de semejantes violaciones fue una de las exigencias de la oposición que reunió en las calles a millones de ucranianos en apoyo a Yuschenko y el voto limpio.
Por eso Yanukovich anunció su intención de interponer este miércoles un recurso ante el Supremo para impugnar esos resultados, para lo cual este martes presentó a ese tribunal una petición formal de aplazar la publicación oficial, que inmediatamente fue satisfecha. El presidente de la CEC, Yaroslav Davidovich, consideró "correcto y democrático" que el perdedor de la comicios pueda recurrir los resultados ante el Supremo y confirmó que la Comisión no publicará esos datos hasta que la Corte no decida sobre la queja presentada.
Por otra parte, recordó que el Supremo ya desestimó todos los recursos presentados hasta ahora por Yanukovich y señaló que la CEC está dispuesta a defender ante los magistrados su resolución, por la que ayer proclamó como presidente electo al líder opositor. Davidovich aseguró que esa resolución es "legal al cien por cien" y que la reunión de la CEC la víspera se celebró "respetando todos los aspectos formales, jurídicos y de procedimiento, por primera vez en los últimos 8 años".
La anterior composición de la CEC había proclamado a Yanukóvich como ganador de la segunda vuelta electoral del 21 de noviembre, que el Supremo y el Parlamento invalidaron por fraude masivo y ordenaron repetir el 26 de diciembre, cuando ganó Yuschenko. En sus recursos, Yanukovich intenta descalificar los comicios con el argumento de que los cambios en la ley electoral adoptados por el Legislativo para garantizar la limpieza de la nueva cita con las urnas tras la anterior fraudulenta habían afectado al derecho de los ancianos y minusválidos de votar a domicilio.
El voto a domicilio, junto con los boletines para votar de forma anticipada o fuera de la circunscripción de residencia, fueron el principal instrumento de fraude en la segunda ronda de las elecciones presidenciales. La revisión de la ley electoral para abortar la posibilidad de semejantes violaciones fue una de las exigencias de la oposición que reunió en las calles a millones de ucranianos en apoyo a Yuschenko y el voto limpio.
