A las 21:00 está previsto que el jefe de Estado se dirija, como es tradición, a todos los españoles a través de un mensaje navideño televisado. En él, el monarca suele repasar los retos pasados y, sobre todo, futuros que afronta España.
Entre los asuntos que dominan la actualidad se encuentran las múltiples sospechas de corrupción que pesan sobre su yerno Iñaki Urdangarín. Las informaciones aparecidas en los medios de comunicación y la trama urdida por el Duque de Palma a través del Instituto Noos, han convertido a la Casa Real en primera plana informativa de este final de 2011.
Tanto es así que el propio Duque de Palma podría ser procesado o imputado por delitos como evasión de capitales o tráfico de influencias. Así pues, habrá que esperar hasta esta Nochebuena para saber si Don Juan Carlos decide o no enviar un mensaje especial a su yerno.
El mensaje de Don Juan Carlos será emitido por el Canal 24 Horas de TVE con traducción al lenguaje de signos para las personas sordas, según han informado fuentes de la Casa del Rey. Las autonómicas, Antena 3, Telecinco y La Sexta también retransmitirán el tradicional mensaje del Rey.
Esta es la primera vez que las personas con discapacidad auditiva podrán acceder al contenido del discurso navideño de Don Juan Carlos, durante su emisión, a través del lenguaje de signos.
Apuestas
La expectación por el mensaje navideño de este año es tal que las casas de apuestas de internet ya animan a los usuarios a que se jueguen su dinero por la mención o no de Urdangarín. Que Su Majestad mencione al Duque de Palma en el discurso se paga cinco a uno en el portal de apuestas William Hill.
Las apuestas van desde si "Juan Carlos se quitará sus gafas de sol durante el discurso", al "comienzo" o "al final" hasta si "Iñaki Urdangarín se sentará junto a Juan Carlos durante el discurso" o si "mencionará a Iñaki Urdangarín".
La mayoría de las casas que ofrecen a sus usuarios la posibilidad de apostar por las diferentes hipótesis que sobre el discurso del Rey son británicas, ya que están acostumbradas a ofrecer apuestas extradeportivas merced a los líos que suele protagonizar la Familia Real británica.