Demasiado tarde y demasiado viejo como para cambiar de costumbres.
También cuando va de caza piensa en los parados?
Mira, esta noticia es un pequeño chorro de optimismo: el aventurero y matador de elefantes mientras el país renquea en la miseria tiene que salir escondido por la puerta de atrás. Temiendo que le lluevan tomatazos, se sobreentiende.
No somos un país bananero después de todo. Muy civilizados tampoco, desde luego, pero no todo está perdido.
...y disfrazado de mecánico.