(Libertad Digital) Este viernes arranca de nuevo el juicio por el sumario 18/2001 que instruye la pertenencia a ETA de las organizaciones Haika-Segi-Jarrai, intencionadamente denominadas por Arzalluz “los chicos de la gasolina”. Lejos de ser jóvenes radicales, los 32 procesados que pasarán de nuevo por la Audiencia Nacional van acompañados por hasta 10 abogados –2 representan a la AVT– y unas 150 personas entre familiares, políticos y amigos que también están imputados en el sumario matriz 18/98 contra la estructura básica de ETA.
Pero las aristas de este accidentado proceso empiezan a ser casi más importantes que el juicio en sí. Por eso, la reunión que el consejero Azkarraga ha mantenido con una de las organizaciones imputadas se convierte en una clave. Entre otras cosas, el juicio habrá concluido y tendrá sentencia hacia el mes de marzo, es decir, antes de la celebración de las elecciones autonómicas en el País Vasco convocadas para el día 17 de abril por Ibarretxe. Mientras, el tripartito ya busca fecha para votar una moción de SA –grupo parlamentario aún presente de la ilegalizada Batasuna– contra la Ley de Partidos, es decir, para que el brazo político de ETA pueda estar en las urnas el 17 de abril.
La reunión ya ha tenido reacciones, aunque también estas deben ser analizadas. Mientras el portavoz parlamentario del PSE, Rodolfo Ares, ha mostrado su indignación –"no es digno de la responsabilidad que ostenta", dice–, un concejal de su partido en Llodio no ha dudado en sumarse a una plataforma de apoyo a los “vecinos” que tienen que acudir a la Audiencia Nacional. Se trata de Ander Ontoso. Su intención es estar presente en la rueda de prensa que este viernes convocarán miembros de las organizaciones imputadas por su pertenencia a la estructura de ETA. “Iré –dice Ontoso– porque respaldo que tengan un juicio justo imparcial y con garantías”.
Cabe recordar que el pasado lunes, cuando el juicio se aplazó, los imputados iban acompañados por un séquito de 10 abogados, más de 150 personas de apoyo y representantes de todos los medios de comunicación vascos. Dos letrados representaban la acusación de la AVT.