LD (Europa Press) Las explosiones, que se produjeron a partir de la una y media de la tarde, fueron anunciadas al diario “Gara”, por lo que algunas de las zonas pudieron ser desalojadas antes de que los explosivos estallasen. Aún así, causaron varios heridos de escasa consideración.
El primero de los avisos se produjo a las 12.40 horas y en la llamada se alertaba de que cuatro artefactos estallarían a las 13.30 horas en puntos de Valladolid, León, Ávila y Santillana del Mar (Cantabria). Quince minutos después, se produjo una segunda llamada en la que se comunicaba la colocación de explosivos en Alicante, Málaga y Ciudad Real, listos para estallar también a las 13.30 horas.
Algunas bombas fueron colocadas en locales de hostelería –las tres colocadas en Castilla y León– y otras en la vía pública. Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado procedieron a desalojar y acordonar los lugares donde finalmente explotaron las siete bombas, todas ellas de escasa potencia.
En Santillana del Mar hubo dos heridos de escasa consideración y en Ciudad Real, tres heridos leves, dos de ellos policías, mientras se desalojaba una cafetería. Tres de las calles y plazas en las que explotaron los artefactos incluían la palabra “España” en su denominación.
Además, tres días antes, el viernes 3, ETA hizo estallar cinco pequeños artefactos en otras tantas gasolineras del extrarradio de Madrid. El atentado múltiple provocó heridas leves en dos policías y serias dificultades en la circulación tráfico que salía de la capital.