L D (EFE)
Los detenidos en Valencia son María Dolores Cerdá Ibáñez, Enrique Cerdá Ibáñez, Federico Tarazona Tarazona y Francisco Palop Monje, y el arrestado en Logroño es el paquistaní Ahmed Rukhsar. Según el ministro del Interior, Angel Acebes, los cinco formaban parte, presuntamente, del entramado de financiación de la organización terrorista Al-Qaeda, liderada por Osama ben Laden, y podrían estar relacionados también con el atentado cometido contra una sinagoga de Yebra (Túnez), el 11 de abril de 2002, en el que murieron 16 personas, entre ellas once turistas alemanes y dos franceses.
Su arresto se llevó a cabo por orden del Juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, a raíz de una petición cursada por las autoridades francesas para que investigara la presunta relación de estas personas con otros supuestos miembros de Al-Qaeda arrestados en su territorio y con los autores del atentado en Túnez. No obstante, según informa Efe , la Guardia Civil ya tenía abierta una investigación sobre ellos al sospechar que los detenidos podrían estar blanqueando dinero a través de sus negocios y consiguiendo financiación que luego se destinaba a organizaciones del entorno de Al-Qaeda.
Sin embargo, según Europa Press , los familiares de algunos de los detenidos en esta operación afirman que los arrestados no tienen nada que ver con Al-Qaeda. En concreto, Rafael Bort, marido de María Dolores Cerdá y cuñado de Enrique Cerdá (ambos detenidos en Valencia), ha declarado que estos arrestos son producto de un “error”. Según Bort, la empresa de su propiedad “desde hace una temporada estaba atravesando una situación económica muy difícil”, por lo que se preguntó: “¿Cómo podemos nosotros financiar a unos tíos y quedarnos con el culo al aire?”. En su opinión, todo esto es “un drama increíble”, pues “están tratando a mi mujer como a una terrorista peligrosísima que tiene un poder increíble”.
La empresa “Hispanio Calco” se dedica a fabricar los dibujos que decoran azulejos y vajillas. Es propiedad de los hermanos Cerdá Ibáñez y Rafael Bort es socio de la compañía, que “cuenta ya con 16 ó 17 años en el mercado”. Durante todo este tiempo, la empresa “ha exportado a Rumanía, Polonia, Francia, Inglaterra, Venezuela, Santo Domingo, Jordania, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, entre otros países”, según Bort, aunque ahora “se están sacando las relaciones que son las que interesa que sean, como un entramado”, declaró. En este sentido, Rafael Bort señaló que su cuñado, como agente comercial, ha sido el encargado de hacer “todos los viajes” al exterior. “Hispanio Calco” también mantiene negocios en la propia Comunidad Valenciana, con empresas castellonenses tan importantes como “Zirconio” o “Porcelanosa”.
Por lo que se refiere a las vinculaciones religiosas de la familia Cerdá Ibáñez, el marido de Dolores Cerdá dijo: “Yo estoy trabajando en un colegio cristiano, soy católico, mis cuñadas han estudiado en Guadalaviar, que es un centro del Opus, y mi mujer es como yo, y desde luego no sabemos nada del Islam”.
Su arresto se llevó a cabo por orden del Juzgado de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, a raíz de una petición cursada por las autoridades francesas para que investigara la presunta relación de estas personas con otros supuestos miembros de Al-Qaeda arrestados en su territorio y con los autores del atentado en Túnez. No obstante, según informa Efe , la Guardia Civil ya tenía abierta una investigación sobre ellos al sospechar que los detenidos podrían estar blanqueando dinero a través de sus negocios y consiguiendo financiación que luego se destinaba a organizaciones del entorno de Al-Qaeda.
Sin embargo, según Europa Press , los familiares de algunos de los detenidos en esta operación afirman que los arrestados no tienen nada que ver con Al-Qaeda. En concreto, Rafael Bort, marido de María Dolores Cerdá y cuñado de Enrique Cerdá (ambos detenidos en Valencia), ha declarado que estos arrestos son producto de un “error”. Según Bort, la empresa de su propiedad “desde hace una temporada estaba atravesando una situación económica muy difícil”, por lo que se preguntó: “¿Cómo podemos nosotros financiar a unos tíos y quedarnos con el culo al aire?”. En su opinión, todo esto es “un drama increíble”, pues “están tratando a mi mujer como a una terrorista peligrosísima que tiene un poder increíble”.
La empresa “Hispanio Calco” se dedica a fabricar los dibujos que decoran azulejos y vajillas. Es propiedad de los hermanos Cerdá Ibáñez y Rafael Bort es socio de la compañía, que “cuenta ya con 16 ó 17 años en el mercado”. Durante todo este tiempo, la empresa “ha exportado a Rumanía, Polonia, Francia, Inglaterra, Venezuela, Santo Domingo, Jordania, Arabia Saudí, Emiratos Árabes, entre otros países”, según Bort, aunque ahora “se están sacando las relaciones que son las que interesa que sean, como un entramado”, declaró. En este sentido, Rafael Bort señaló que su cuñado, como agente comercial, ha sido el encargado de hacer “todos los viajes” al exterior. “Hispanio Calco” también mantiene negocios en la propia Comunidad Valenciana, con empresas castellonenses tan importantes como “Zirconio” o “Porcelanosa”.
Por lo que se refiere a las vinculaciones religiosas de la familia Cerdá Ibáñez, el marido de Dolores Cerdá dijo: “Yo estoy trabajando en un colegio cristiano, soy católico, mis cuñadas han estudiado en Guadalaviar, que es un centro del Opus, y mi mujer es como yo, y desde luego no sabemos nada del Islam”.
