
L D (EFE)
Se trata de Ibon Elorrieta Sanz y Luis Enrique Gárate Galarza, detenidos el lunes pasado en Cognac, al norte de Burdeos (suroeste); de Jon Kepa Preciado y Jon González González, arrestados en la madrugada del miércoles en un apartamento de Limoges (centro), y de Diego Ibarra, detenido el jueves en la localidad francesa de Bidart. Además de por asociación de malhechores con fines terroristas, los cuatro primeros fueron imputados también por receptación en banda organizada, tenencia y transporte de armas en reunión, posesión de documentos falsos y uso de matriculas falsas.
Elorrieta y Gárate, que transportaban más de 30 kilos del explosivo amonal y diversos tipos de armas y municiones en la furgoneta robada en la que viajaban cuando intentaron eludir un control de aduanas, fueron procesados también por infracción a la legislación sobre explosivos. Ibon Elorrieta, por su parte, fue imputado asimismo por negativa a obedecer las ordenes de un agente del orden.
Este tiene pendiente una condena en rebeldía a cinco años de prisión dictada por el Tribunal Correccional de París el pasado año en un juicio contra los antiguos responsables del aparato de logística de ETA.
Diego Ibarra, miembro de Segi, cuya foto estaba entre los documentos incautados a Elorrieta y Gárate, fue procesado por complicidad en falsificación de documentos, así como por asociación de malhechores con fines terroristas.
Fuentes de la lucha antiterrorista consideran que Elorrieta y Gárate eran destacados miembros de la banda terrorista, encargados de hacer llegar el material explosivo y las armas a los pistoleros. En el momento de su detención se disponían a hacer una entrega para un atentado inminente en España.
Elorrieta y Gárate, que transportaban más de 30 kilos del explosivo amonal y diversos tipos de armas y municiones en la furgoneta robada en la que viajaban cuando intentaron eludir un control de aduanas, fueron procesados también por infracción a la legislación sobre explosivos. Ibon Elorrieta, por su parte, fue imputado asimismo por negativa a obedecer las ordenes de un agente del orden.
Este tiene pendiente una condena en rebeldía a cinco años de prisión dictada por el Tribunal Correccional de París el pasado año en un juicio contra los antiguos responsables del aparato de logística de ETA.
Diego Ibarra, miembro de Segi, cuya foto estaba entre los documentos incautados a Elorrieta y Gárate, fue procesado por complicidad en falsificación de documentos, así como por asociación de malhechores con fines terroristas.
Fuentes de la lucha antiterrorista consideran que Elorrieta y Gárate eran destacados miembros de la banda terrorista, encargados de hacer llegar el material explosivo y las armas a los pistoleros. En el momento de su detención se disponían a hacer una entrega para un atentado inminente en España.
