(Libertad Digital) Esta vez sí hubo remodelación de Gobierno y no se quedó todo en un rumor periodístico más. Hace ya semanas que LD propuso a sus lectores una quiniela para elegir a los cinco ministros que debían dejar el Ejecutivo. Y cinco han sido los defenestrados por Zapatero. Eso sí, a cambio ha nombrado a seis más. Con lo cual no sólo no se adelgaza el Gobierno, sino que se engorda más con la creación de una estrafalaria vicepresidencia tercera, bautizada de cooperación territorial, creada ad hoc para colocar a Manuel Chaves.
Los lectores de LD que han participado en la quiniela ministerial coinciden con Zapatero en el caso de Magdalena Álvarez y Pedro Solbes, sin duda los ministros más quemados. Fueron los más votados por nuestros lectores con 24.493 votos Álvarez, y 23.027 votos Solbes. La pésima gestión de la hasta hoy ministra de Fomento es pública y notoria, y en el caso de Solbes, sólo le faltaba suplicar públicamente a Zapatero que lo relevase, dejando tras de sí un desastre económico sin precedentes en la historia reciente de España. Por tanto, parecía casi obligado que cualquier crisis de Gobierno afectase a estas dos carteras.
A partir de ahí, Zapatero mantiene en el Gobierno a los siguientes ministros más votados por nuestros lectores. Por este orden: Bibiana Aído, Pérez Rubalcaba, Miguel Ángel Moratinos, Carmen Chacón, De la Vega y Miguel Sebastián.
En el caso de Aído (21.461 votos), encabeza un ministerio sin competencias reales y lo único que ha hecho es soliviantar a una parte muy importante de la sociedad española con una nueva ley del aborto, diseñada en base a un informe que ella misma ha reconocido que tiene un claro sesgo proabortista. Una ley hecha a la medida del feminismo radical y la industria abortista que genera cuantiosos beneficios a esas clínicas que aplauden una reforma que les permitirá practicar abortos a niñas menores de edad sin permiso paterno y serán sufragados por todos los contribuyentes. Sigue de ministra de Igualdad.
En cuarto lugar, pero ya a una distancia considerable de Aído se sitúa Alfredo Pérez Rubalcaba (14.787 votos). No era previsible que dejase el Gobierno, pese a los deseos de nuestros lectores y, a buen seguro, muchos otros españoles. Es más, se llegó a hablar de él como vicepresidente en sustitución de Fernández de la Vega. ¿Qué decir de Rubalcaba que no se sepa ya? El balance de su gestión como ministro del Interior, al margen de la política antiterrorista, no es precisamente positivo. El descontento de policías y guardias civiles les está llevando a movilizaciones históricas. Han llegado a amenazar con una huelga, hasta hace poco algo impensable en estos cuerpos. Además de los casos de corrupción policial (desaparición de droga en la comisaría de Sevilla, el caso de los alternes en Barcelona...) y el aumento de la inseguridad, las batidas policiales para detener sin papeles o la presencia del jefe de la policía judicial, subordinado suyo, en la cacería de Garzón y Bermejo, que le costó el puesto al ex ministro de Justicia. De hecho, desde el PP se ha acusado a Rubalcaba de estar detrás de las filtraciones a los medios de las investigaciones sobre la corrupción en el seno del PP. Seguirá en Interior.
Miguel Ángel Moratinos, ministro de Exteriores, ocupa el quinto lugar con 14.691 votos. Es el responsable junto a Zapatero de una política exterior que nos ha enfrentado seriamente con democracias de la importancia de EEUU e Israel, que ha reducido al mínimo nuestra capacidad de influencia en la UE y en la escena internacional, y que ha colocado a España al lado de regímenes totalitarios como el los hermanos Castro en Cuba, o la Venezuela chavista, cuando no de organizaciones abiertamente terroristas como Hamas. Si por algo se ha caracterizado Moratinos es por romper todos los consensos en política exterior, como en el caso del Sáhara, abandonando a su suerte al pueblo saharaui para favorecer las relaciones con el régimen de Mohamed VI. Sigue en Exteriores.
Hasta aquí los cinco ministros que más lectores de LD consideran que debían dejar el Gobierno. Muy cerca se ha quedado Carmen Chacón (13.435 votos) que, más allá de operaciones de imagen y anécdotas como su embarazo, ha generado un grave conflicto con los aliados de España en la primera decisión de cierto calado que ha gestionado. Chacón ha convertido la lógica retirada de las tropas españolas destinadas en Kosovo en una chapuza populista que ha irritado a EEUU y el resto de miembros de la OTAN. Sigue en Defensa.
De los otros tres ministros que Zapatero ha decidido relevar, los más votados por nuestros lectores son Mercedes Cabrera (7.446 votos) y Bernat Soria (5.576 votos) que comparten el mérito de generar bastante rechazo pese a no tener prácticamente competencias. Cabrera ha sido penalizada probablemente por la imposición de la asignatura de adoctrinamiento Educación para la Ciudadanía. Antes que ellos, los lectores de LD se hubiesen cargado a De la Vega (12.988 votos) y Miguel Sebastián (8.615 votos). No genera mucho rechazo Celestino Corbacho (5.580 votos) pese a ser ministro de Trabajo con el paro aumentando exponencialmente. Parece que la audiencia de LD entiende que el desastre del empleo tiene otros responsables más directos.
El caso de César Antonio Molina que dejará la cartera de Cultura es el que muestra mayor disparidad de criterio entre Zapatero y quienes han participado en la quiniela de LD. Es el quinto menos votado con sólo 1.259 votos pero quién decide es el presidente y deberá dejar el Gobierno. Se puede observar mayor coincidencia en el caso de Elena Salgado. Es la segunda ministra que menos rechazo ha generado (891 votos), sólo por detrás del casi inédito Caamaño, y Zapatero ha decidido que pase de un ministerio como Administraciones Públicas sin demasiado peso político a ocupar nada menos que la vicepresidencia segunda y dirigir la política económica del Gobierno.

