L D (EFE) Desde la mañana de este jueves, los madrileños lucen improvisadas pegatinas y pancartas pintada a mano contra ETA. Vecinos de la calle Téllez, en las inmediaciones de la Estación de Atocha, donde se registraron las más fuertes explosiones, han colocado en los balcones y terrazas pancartas y carteles con la inscripción "Basta ya. Vascos sí. ETA no", y con impresiones de manos manchadas de rojo.
Las calles de Madrid, normalmente muy ajetreadas, resultan este jueves peculiarmente silenciosas: se registra menos afluencia de tráfico, y el metro aparece menos concurrido. Los peatones circulan cabizbajos y con la tragedia dibujada en el rostro; los bares, tradicional punto de encuentro urbano, están sospechosamente vacíos, y las compras se han dejado para otro día, según puede constatarse en los tradicionales y generalmente abarrotados grandes almacenes de Madrid.
No se habla de otra cosa, las llamadas de teléfono ente unos y otros repiten los datos más recientes del atentado, que ha costado la vida ya a 190 personas y ha dejado un millar y medio de heridos.
Las calles de Madrid, normalmente muy ajetreadas, resultan este jueves peculiarmente silenciosas: se registra menos afluencia de tráfico, y el metro aparece menos concurrido. Los peatones circulan cabizbajos y con la tragedia dibujada en el rostro; los bares, tradicional punto de encuentro urbano, están sospechosamente vacíos, y las compras se han dejado para otro día, según puede constatarse en los tradicionales y generalmente abarrotados grandes almacenes de Madrid.
No se habla de otra cosa, las llamadas de teléfono ente unos y otros repiten los datos más recientes del atentado, que ha costado la vida ya a 190 personas y ha dejado un millar y medio de heridos.
Internet y los "chats" más populares han multiplicado por ocho su número de contactos, como respuesta inmediata a la búsqueda de comunicación con los muchos inmigrantes residentes en Madrid, al quedar congestionada la comunicación por teléfono móvil.
