L D (EFE) En el transcurso de un almuerzo-coloquio, organizado por la Fundación Encuentros, Pasqual Maragall no quiso adelantar los posibles pactos que baraja el Partido Socialista de Cataluña y dijo que, por supuesto, "tenían sus cálculos" pero "no los iba a contar".
Maragall también criticó la "tradicional" alianza entre CiU y PP que, durante muchos años, "ha dictado la ley" y aseguró que en Cataluña "crece la sensación de que hay que asegurar un cambio, y eso ERC no lo va a capitalizar". En referencia al Plan Ibarretxe, el candidato socialista señaló que el "tema vasco no es que contamine la campaña electoral, es que el tema vasco lo contamina todo". En este sentido, Maragall subrayó que, a su juicio, "lo que quiere el Gobierno de Aznar es un buen enemigo", ya sea éste "Ibarretxe, el terrorismo o Irak".
También se refirió a que "Cataluña no tiene soluciones para el País Vasco" pero "Euskadi tendría otra solución" si el Gobierno central planteara "en otros términos". Aquí, Maragall explicó que "a veces los temas no se resuelven por que un tipo de resolución permitiría a los demás aducir lo mismo" y, en este sentido, recalcó, dirigiéndose al Ejecutivo central, que "se haga lo que se haga con el País Vasco, Cataluña no quiere lo mismo".
A la pregunta de que si gana las elecciones a quien iría a ver primero a Madrid: si a Aznar, a Rajoy o a Zapatero, Maragall respondió que por la autovía más cerca que Madrid le queda la Comunidad Valenciana y Murcia, así que teniendo en cuenta el Plan Hidrológico Nacional y "lo mal que se planteó", "primero -dijo- iría a ver a Camps y luego a Valcárcel". Con estas visitas intentaría acercar posturas "por lo mal que se entendió" el PHN y recordó que Murcia es la comunidad que más paga por el recibo del agua, y "luego está Cataluña".
Maragall también criticó la "tradicional" alianza entre CiU y PP que, durante muchos años, "ha dictado la ley" y aseguró que en Cataluña "crece la sensación de que hay que asegurar un cambio, y eso ERC no lo va a capitalizar". En referencia al Plan Ibarretxe, el candidato socialista señaló que el "tema vasco no es que contamine la campaña electoral, es que el tema vasco lo contamina todo". En este sentido, Maragall subrayó que, a su juicio, "lo que quiere el Gobierno de Aznar es un buen enemigo", ya sea éste "Ibarretxe, el terrorismo o Irak".
También se refirió a que "Cataluña no tiene soluciones para el País Vasco" pero "Euskadi tendría otra solución" si el Gobierno central planteara "en otros términos". Aquí, Maragall explicó que "a veces los temas no se resuelven por que un tipo de resolución permitiría a los demás aducir lo mismo" y, en este sentido, recalcó, dirigiéndose al Ejecutivo central, que "se haga lo que se haga con el País Vasco, Cataluña no quiere lo mismo".
A la pregunta de que si gana las elecciones a quien iría a ver primero a Madrid: si a Aznar, a Rajoy o a Zapatero, Maragall respondió que por la autovía más cerca que Madrid le queda la Comunidad Valenciana y Murcia, así que teniendo en cuenta el Plan Hidrológico Nacional y "lo mal que se planteó", "primero -dijo- iría a ver a Camps y luego a Valcárcel". Con estas visitas intentaría acercar posturas "por lo mal que se entendió" el PHN y recordó que Murcia es la comunidad que más paga por el recibo del agua, y "luego está Cataluña".
