LD (EFE)
Según ha dicho Trillo en la base de Torrejón de Ardoz, el cumplimiento de los planes de instalación y despliegue, así como ese carácter positivo de los primeros contactos con los iraquíes, permitirá adelantar el traspaso del mando por parte de los "marines" norteamericanos al próximo 28 de agosto, en lugar del 2 de septiembre que era la fecha inicial prevista.
La recepción de las autoridades civiles fue descrita por el ministro como "muy cordial" y la de los líderes religiosos chiitas como "muy, muy favorable". "Los soldados españoles -añadió- tienen ese espíritu tan especial que les hace ser muy apreciados en todo el mundo, porque se han ganado el prestigio y el afecto de los pueblos donde han estado desarrollando ese tipo de misiones".
El ministro de Defensa destacó que uno de los problemas que ha tenido el general Cardona es que los hombres y mujeres que ya están en Diwaniya cesen de trabajar a la hora prevista, cuando hace más calor: "allí se empieza muy de madrugada porque el calor es terrible, entre 45 y 50 grados, pero los soldados quieren seguir trabajando cuando termina el horario establecido, con el fin de que todo esté listo para cuando lleguen sus compañeros".
Trillo definió como "muy compleja" la operación de situar, instalar y abastecer en Irak a una fuerza como la Brigada Plus Ultra, compuesta por 1.300 soldados españoles y 1.200 centroamericanos, lo que ha obligado a utilizar todos los recursos disponibles de la Armada y el Ejército del Aire, al servicio de una misión que lleva a cabo fundamentalmente el Ejército de Tierra.
La recepción de las autoridades civiles fue descrita por el ministro como "muy cordial" y la de los líderes religiosos chiitas como "muy, muy favorable". "Los soldados españoles -añadió- tienen ese espíritu tan especial que les hace ser muy apreciados en todo el mundo, porque se han ganado el prestigio y el afecto de los pueblos donde han estado desarrollando ese tipo de misiones".
El ministro de Defensa destacó que uno de los problemas que ha tenido el general Cardona es que los hombres y mujeres que ya están en Diwaniya cesen de trabajar a la hora prevista, cuando hace más calor: "allí se empieza muy de madrugada porque el calor es terrible, entre 45 y 50 grados, pero los soldados quieren seguir trabajando cuando termina el horario establecido, con el fin de que todo esté listo para cuando lleguen sus compañeros".
Trillo definió como "muy compleja" la operación de situar, instalar y abastecer en Irak a una fuerza como la Brigada Plus Ultra, compuesta por 1.300 soldados españoles y 1.200 centroamericanos, lo que ha obligado a utilizar todos los recursos disponibles de la Armada y el Ejército del Aire, al servicio de una misión que lleva a cabo fundamentalmente el Ejército de Tierra.