Sin querer pecar de pedante, pero la sintaxis de "¿Quién incita al odio, quien denuncia la exclusión o quien la lleva a cabo?", y la serie de preguntas del mismo sentido que siguen en el párrafo, no son correctas; creo que sería así: Quién incita al odio, ¿quien denuncia la exclusión o quien la lleva a cabo?
Mamenrg, yo he vivido en Cataluña muchos años, y me fui hace un año y medio. Y, aunque entiendo a los catalanistas, y hasta reconozco que no se me ocurre nada para salvar la lengua catalana que no sea parecido o idéntico a lo que hacen ellos, tengo una experiencia algo distinta de la tuya. He sentido una enorme presión ambiental adversa al idioma castellano y obsesionada con la defensa del catalán. Podría dar multitud de ejemplos. Recuerdo a una compañera de trabajo, vasca ella (y hablante euskaldún), que habló en catellano a los hijos de una vecina y fue interrupida por ésta, que dijo "no les hable en castellano". Es sólo un ejemplo entre muchísimos que puedo contar. Y repito, entiendo a los catalanistas y hasta cierto punto simpatizo con ellos.
En efecto, mamenrg, en Cataluña, "nadie te atosiga por la calle si ..."
Es dentro de las escuelas e institutos, es en los hospitales, a los profesionales y en los organismos oficiales.
Gracias a personas como usted, que no ven lo que tienen ante sus narices, creció un tal Hitler, en Alemania, y un tal Pujol y sus pujolismo en Cataluña. Las diferencias son las de cajón. Hace tiempo que he dejado de razonar con la gente que no usa el cerebro, para estos asuntos, sino el corazón u otras vísceras menos risueñas.
La característica fundamental del malvado es la falta de empatía.
Una de sus manifetaciones es la de acusar a los demás de aquello que ellos mismos hacen. Viven tan metidos en su propio mundo, que ni entienden lo que se les dice o se les hace. Ven fantasmas, ven ataques que no existen en absoluto. Ellos sí atacan, claro. Y encima lo niegan, lo cual es flipante.
Te pueden multar por rotular en español, o sancionar al funcionario que usa el español, pero luego dicen que ellos no persiguen al español, y que es en el resto de España donde se persigue al catalán... a pesar de que en ningún sitio se le hace nada a nadie por usar el catalán.
Es absolutamente el mundo al revés. Es el mundo del malvado. Es un mundo tan falto de empatía, que sólo piensa en "yo, yo, yo", y que el que no llora no mama, y que el que no afana es un gil. Así que se dedican a llorar todo lo que pueden, a afanar todo lo que pueden, y encima, a hacerse las víctimas.
Los nazis alemanes se consideraban las víctimas de los judíos, igual que ahora los nazis palestinos, igual que los archimillonarios del P$O€ se atreven a hablar de ricos y pobres... Su egocentrismo y egoísmo les tiene completamente fuera de la realidad.
Y como bien dice chipie25, el problema es que se les consiente. En el mundo del siglo XXI, todo se consiente -o sea, se consiente que la mierda conviva con lo bueno, lo bello, y lo verdadero.
yo veo mas odio en el resto de España hacia Cataluña que odio a España desde Cataluña, y lo digo viviendo en Cataluña.
Yo no vivo nada de los que día si y dia tambien decis aqui, falsedades a m,as no poder.
En Cataluña se vive muy bien y nadie te atosiga por la calle si eres castellanohablante.
Estoy harta de tantas mentiras
No es un "mecanismo de defensa" sino de ataque, de conquista de seguidores, de persecución a disidentes.
Y el error de los no nacionalistas está en responder defensivamente.
¡Pedir lógica a los dementes! ¡Pedirle cordura a Hitler!
Cuando la dirigente del PPC se pone de lado, cuando los del PP o el PSOE nacional se acercan a los dementes y les dan un trato de favor o de respeto, cuando Carmen Chacón juega a que es, pero no es, cuando en la Real Academina de la Lengua se elige a una catalanista para que ocupe un sillón, el que fuere, cuando se les escucha, cuando se les considera fiables y respetables, ...
¡Hace tantos años que se les permiten todo tipo de ferocidades, de brutalidades, de demencias -sin sangre, sí, como en Vascongadas, pero, precisamente por ello, peores-, hace tanto tiempo que se ha estado tratado a Pujol como si fuera digno de respeto y a sus hijos políticos como si no fueran cuatreros...
La sociedad catalana, que tuvo seny, que fue adelantada y laboriosa, que fue respetable, ahora no merece sino desprecio.
Es despreciable que el PPC revolotee entorno a Mas, es repulsivo que el PP se lo permita, es repugnante que el PSC se baje los pantalones, lo es, igualmente, que el PSOE le ría las pocas gracias que tiene a Chacón, como si representara la decencia y la lógica de la defensa de los más débiles...
Todo es bien aberrante en lo que se refiere a la política nacional con respecto a los independentistas que, no lo olvidemos, en Cataluiña ya lo son, en mayor o menor medida, hasta los de UPyD con su defensa de una escuela en la que se pueda elegir la lengua vehicular.
¡"Entre todos la mataron y ella sola se muri", vaya!
Los nacionalistas catalanes no creen que una sociedad bilingüe pueda ser algo duradero, no al menos en los tiempos que vivimos. ¿Por qué? Pues porque vivimos en una sociedad basada en la comunicación de masas y en el debate público, y ambas cosas requieren una lengua vehicular. Dos lenguas vehiculares pueden significar: 1) dos sociedades, que pueden ocupar el mismo espacio geográfico pero seguir siendo dos sociedades distintas; era el caso de muchas regiones del antiguo Imperio Austro-húngaro, como Transilvania (húngaros y rumanos) o Bohemia (alemanes y checos), lugares donde las dos o más sociedades vivían virtualmente yuxtapuestas en cada población, ocupando cada una su propio barrio. Y dos lenguas vehiculares también pueden significar: 2) una sociedad en la que todos o casi todos sus miembros hablan y usan indistintamente ambas lenguas. Esto es sin duda lo que quieren los bilingüistas en Cataluña, pero hay que hacer notar que se trata de una situación altamente inestable, y que suele derivar, sea hacia el monolingüismo, sea hacia un bilingüismo del tipo anterior. Así, en la Cataluña anterior a la emergencia del nacionalismo era bien visible el progresivo abandono del catalán por parte de la población urbana de mayor nivel económico. En Valencia, este proceso ha llegado a su casi total culminación. En la región francesa de Occitania, el occitano o "lengua de oc", que había florecido en la poesía trovadoresca de la Edad Media, está hoy prácticamente extinguido.
¿Por qué en otros tiempos el bilingüismo no planteaba problemas? Sencillamente, porque antes, cuando la sociedad no se basaba en la comunicación de masas, sólo las capas más elevadas, el Rey y la nobleza, eran políticamente activas. Bastaba con el que el Rey y los nobles conocieran los distintos idiomas de sus súbditos. Es sabido que los Habsburgos, Carlos V entre ellos, eran grandes políglotas. El pueblo llano no participaba en la política y el debate público, tal como hoy lo conocemos, no existía.
Siendo esto así, para los catalanistas la eliminación del castellano es una cuestión de supervivencia. Por esto luchan con tanta vehemencia, con tanto fanatismo. Creen que les van en ello la vida, o sea su vida como pueblo. No pretendo justificarlos; sólo exponer las cosas tal como ellos las ven, para que se entienda por qué se comportan como lo hacen.
Lo grave señor Robles, no es que estos "dementes" actuen demencialmente, es lo suyo, lo grave es que se les consienta y tolere desde el resto de España.
Y que haya tantos catalanes que apoyan esas dictaduras nazionalistas tambien es bastante preocupante, al fin y al cabo los nazionaistas solo hacen lo que les dejan hacer, unos por omision y permisividad y otros con su apoyo explicito en las urnas.
Es triste, pero los catalanes en gran medida asi lo quieren.
Y esto lo dice una vasca que tambien sufre lo suyo en su tierra, pero no dejo de reconocer que el mal esta entre mis conciudadanos los vascos.
Aquí en Cataluña hay una obsesión enfermiza por el tema de la lengua catalana, muy respetable como no podía ser de otra forma, pero esa obsesión les lleva a perder la razón. Ven amenazas por todas partes y en mí opinión mucha gente roza lo patológico con este asunto.
En cambio lo de la administración catalana ya es otra cosa, roza lo delictivo.