Menú

Exteriores

Una imagen de los disturbios que han asolado Francia recientemente.
EUROISLAM

Disturbios en el Cinturón Rojo

En diciembre de 1979, a los 31 años, fui a Europa por primera vez. Entonces yo era un comunista revolucionario antiestalinista. Volé a Londres, y, tras un viaje en ferry hasta París, me reuní con los camaradas del movimiento al que pertenecía, centrado en Francia y España. Me llevaron a un café árabe donde los ancianos se sentaban sobre el suelo en largos tablones: comían cuscús marroquí mientras fumaban en pipa y escuchaban música norteafricana.
Ariel Sharón.
DESDE JERUSALÉN

Shar o nada

Si a las evocaciones que despierta Ariel Sharón en la mayoría de los europeos no las tiñera la demonización a la que arteramente lo sometieron los medios, el neologismo sharonada podría eventualmente referirse a un caso por ahora novedoso, hijuelo de la vivaz historia política de Israel: un jefe de gobierno en funciones percibe que no cuenta con suficiente apoyo en su partido (el que lo llevó al poder), por lo que decide abandonarlo (el partido; nunca el poder) y alienta a copartidarios para que deserten de la agrupación y se aglutinen en torno de su persona.
Néstor Kirchner y Hugo Chávez.
IBEROAMÉRICA

El eje Caracas-Buenos Aires

Hubo pocos enemigos tan íntimos como la Unión Soviética y la China maoísta, cuando se suponía que debían ser fuertes aliados, dada su coincidencia ideológica. Cuando el mercado es natural, espontáneo y libre, las partes se ponen de acuerdo pacíficamente: el vendedor pone su precio y el comprador decide si le conviene o no comprar. El precio es el árbitro de la paz y la cooperación voluntaria. Pero cuando el Estado interfiere el mercado e impone los precios por la fuerza policial, entonces introduce violencia en las relaciones.