Lo ocurrido el pasado día 27 de octubre en Murcia pasa de la categoría de anécdota. El historiador y colaborador de este periódico Pío Moa fue dar una conferencia a esta ciudad mediterránea sobre “Las Causas de la Guerra Civil” en el Casino de la ciudad. El caso es que un policía se acercó por el hotel donde se alojaba para interesarse sobre las causas de su presencia en la ciudad y más tarde por el Casino, donde había de celebrarse la conferencia. Sorprende esta actitud de los responsables de la Policía enviando a un agente a interesarse por las presencia del historiador en una conferencia exitosa, repleta de público y previamente anunciada. Suena a labor de intimidación. A pesar de esto, los libros de Pío Moa siguen siendo un auténtico éxito editorial y una suerte de divulgación en contraste con los que siguen silenciando los aconteceres históricos en su afán revisionista de la historia de España.
La actualidad viene marcada por las elecciones de Estados Unidos. Nadie lo puede dudar y en Moncloa son conscientes de su importancia. Al parecer, José Luis Rodríguez Zapatero “aguarda con una enorme expectación el desenlace de la noche electoral en EEUU. Quiere ser el primer presidente europeo en felicitar a John Kerry”. El Semanal Digital nos explica que “fuentes próximas al equipo de política internacional que asesora al presidente, señalan que se han preparado varios informes para que el presidente del Gobierno pueda seguir las alternativas de un empate técnico”. Al parecer, y aunque los "fontaneros" de La Moncloa no creen que haya empate, ESD dice que “entre todos los informes internos, ninguno contempla la eventualidad de un triunfo amplio de George W. Bush ni existe tampoco ninguna proyección de quiénes podrían ser los miembros de su segunda Administración en el caso de esta victoria”.
Lo cierto es que el alineamiento de Zapatero con Kerry ha sido total, aunque no real y mucho menos correspondido. Ni la política de Estados unidos cambiaría ostensiblemente si gana el demócrata, ni el marido de la Heinz siente especial predilección por ZP. Es tal este hecho, que como ya reflejamos hace unos días, Zapatero mandó un emisario a Estados Unidos para reunirse con los demócratas y los republicanos. Los primeros le enviaron al “utillero”, alguien de tercera fila, para explicarle que Kerry no estaba precisamente contento con Zapatero y que, por favor, dejara de utilizar su nombre. Real como la vida misma. Los segundos ni siquiera le recibieron. En EEUU el entusiasmo por las políticas del talante es total, como podemos ver.
Viramos a babor. A Esquerra Republicana se le puede calificar de muchas cosas, pero lo que no se puede decir es que no se muevan. El confi en catalán E-Noticies nos lo cuenta este martes. Dicen que ERC ha puesto en marcha el Instituto de Estudios Socioeconómicos, un think tank de economía para abastecer de ideas y estudios sociales y económicos a sus dirigentes. El nuevo Instituto se ha incorporado a la Fundación José Iparla.
Cambio de tercio. Amplia respuesta de El Confidencial Digital al suelto editorial de La Razón del pasado viernes que recogimos en los Rumores del viernes. El Submarino del diario de Planeta arremetía contra el que fuera impulsor de El Confidencial Digital y hoy director adjunto de Expansión, fuera ya de este medio electrónico. La embestida venía a cuenta del rumor del que se hizo eco ECD y en el que se apuntaba un posible relevo en la dirección de La Razón tras la llegada de Alejandro Vara como director de publicaciones. La respuesta del diario fue tan desmedida que encuentra este martes una serena contrarréplica del director de El Confidencial Digital, Javier Fumero, que explica su hartazgo al decir “que uno termina por cansarse de escuchar a los grandes prohombres de la prensa pregonar en desayunos de porcelana, gomina y mantel blanco el amor a la libertad de expresión, la defensa del rigor y la sensatez en la profesión y no sé cuántas zarandajas más. Si todo eso no va acompañado de hechos resulta, cuando menos, caricaturesco y cargante”.
Para finalizar nos vamos de boda. Se ha casado Alfredo Timmermans, secretario de Estado de Comunicación con José María Aznar. La afortunada ha sido la periodista Pilar García de la Granja. Nos lo cuenta Paloma Barrientos en El Confidencial, que toca ampliamente estos temas que del corazón de la política. Al parecer, “la ceremonia civil se celebró en la finca La Pinilla de Arlanza y...el convite tuvo lugar en el Palacio Ducal de Lerma”. Que les vaya bonito, que dirían algunos. Entre los invitados, salvo el matrimonio Aznar, de viaje por Centroamérica, Zaplana, Esperanza Aguirre, Luis Abril, Juan Carlos Aparicio, Luis del Olmo, Juan Vicente Herrera, Isidro Fainé, César Alierta, Pilar Blanco, Ángel Pardo, Tomás Pascual y un largo etcétera.