Las universidades proponen una estructura de la Selectividad casi común para 2026

Las universidades españolas han pactado un acuerdo que busca una estructura más unificada de la Prueba de Acceso a la Universidad (PAU) –conocida como Selectividad– de cara al curso 2025-2026. La propuesta, creada por la Conferencia de Rectores de las Universidades Españolas (CRUE), se ha presentado este lunes durante las VII Jornadas CRUE sobre Acceso y Admisión celebradas en Madrid.

En el acuerdo, fruto del trabajo de más de 570 especialistas reunidos en las Comisiones Estatales de Materia desde febrero, se ha establecido un marco común para el formato de los exámenes, la distribución de bloques, los niveles de opcionalidad y los criterios de evaluación.

El nuevo pacto se ha planteado como una guía orientativa y no será de cumplimiento obligatorio. Por lo tanto, no se unificarán los contenidos de los exámenes, ya que los temarios que se estudian en bachillerato varían entre comunidades autónomas debido a las competencias educativas de cada gobierno regional.

A pesar de esto, el pacto supone un paso adelante hacia una mayor coherencia en la Selectividad. De hecho, se han armonizado 30 de las 35 materias evaluadas, lo que representa un 85% del total. En disciplinas como Biología e Italiano el consenso ha sido parcial, y en otras como Portugués, Empresa y Diseño de Modelos de Negocio, y Técnicas Gráfico-Plásticas no se ha logrado acuerdo.

¿Cuáles son las novedades acordadas?

Entre las novedades más destacadas del modelo, se define el grado máximo de opcionalidad en las preguntas (las alternativas que puede elegir el alumno), se establece un mínimo de cuestiones competenciales (que requieren aplicar conocimientos, no solo memorizarlos), y se concretan los bloques de preguntas y la puntuación asignada a cada uno.

Por ejemplo, en la asignatura de Lengua Castellana y Literatura II, se ha acordado una estructura dividida en tres bloques: Comunicación (4 puntos), Reflexión sobre la Lengua (3 puntos) y Literatura (3 puntos), con ejercicios obligatorios y otros opcionales. Asimismo, se especifica cómo penalizarán las faltas de ortografía: hasta un 20% en las materias de lengua, un 15% en lenguas extranjeras y un 10% en asignaturas en las que se tenga que desarrollar contenido escrito, como Historia o Filosofía.

"La competencialidad será lenta pero inexorable", ha afirmado Juan Luis Benítez, vicerrector de Estudiantes de la Universidad de Granada. Su homóloga en la Universidad Complutense, Rosa de la Fuente, ha recordado que estas propuestas aún deben ser aprobadas por el Ministerio de Educación y las comunidades autónomas. "No se puede establecer ese máximo de igualdad porque los bachilleratos son distintos según cada comunidad autónoma", ha puntualizado María Antonia Peña, rectora de la Universidad de Huelva y presidenta de Asuntos Estudiantiles de la CRUE.

Por otro lado, la CRUE ha propuesto la creación de un Observatorio de materias PAU para analizar y comparar cómo se evalúa y corrige en las distintas comunidades, con el fin de seguir avanzando hacia un modelo más equitativo y homogéneo.

La selectividad de este curso

La próxima PAU, prevista para los días 3, 4 y 5 de junio de 2025 –excepto en Canarias, que se celebrará los días 4, 5, 6 y 7 de junio; y en Cataluña, los días 11, 12 y 13 de junio– será la primera en celebrarse simultáneamente en casi toda España.

Más de 340.000 alumnos de segundo de Bachillerato participarán en estas pruebas que, según los rectores, deben evolucionar, con el objetivo de que la parte competencial sea mayor que la de memorización.

Este nuevo acuerdo supone una actualización del "Acuerdo de Mínimos de Bilbao" alcanzado en septiembre de 2024, y marca un hito en la búsqueda de mayor equidad y coherencia en el acceso universitario a nivel nacional.