L D (EFE)
El director ejecutivo del programa de enfermedades contagiosas de la OMS, David Heymann, ha explicado en la sede de la ONU que existen todavía muchas incógnitas por desvelar sobre la enfermedad, dado el poco tiempo que ha transcurrido desde su detección. Según sus palabras, "es una nueva enfermedad y no sabemos por qué unas personas transmiten la enfermedad más fácilmente que otras, ni cuántas vías de transmisión existen" para la enfermedad, conocida como Síndrome Respiratorio Agudo y Grave (SARS).
Sólo desde el pasado sábado, se han registrado 213 nuevos enfermos y han muerto 25 afectados en todo el mundo, según las cifras de la OMS. "El futuro de esta enfermedad no lo sabremos hasta que entendamos que está pasando en China", dado que es en este país donde se originó la enfermedad y pasó al ser humano, ha dicho Heymann, para quien la secuencia de contactos ya habría sido desvelada, pues se supone que el virus fue introducido el pasado mes de noviembre por un paciente en un hospital en la provincia China de Guangdong, de manera que el primer contagio detectado fue el de un empleado del centro.
Tras esta oleada de contagios, el virus se habría transmitido a Canadá y a otras zonas asiáticas, entre las que destaca la ciudad de Hong Kong por el alto número de casos, 1.190 enfermos y 47 fallecimientos. En la actualidad, la OMS ha pedido a los viajeros que, como precaución, cancelen sin dudarlo sus viajes a la provincia de Guangdong y demoren, en lo posible, los desplazamientos a Honk Kong. Dado que en la mayor parte de los 21 países donde se ha detectado la neumonía atípica, los casos están controlados y aislados, los esfuerzos internacionales se concentran ahora en China, donde se ha comenzado a trabajar en colaboración con el Gobierno de este país.
Otra de las incógnitas de la enfermedad es la forma de contagio, según Heymann, dado que hasta ahora se suponía que se necesitaba un "contacto cercano" para que el virus se propagara de una persona a otra. Sin embargo, esta teoría ha quedado en entredicho al aparecer un brote en un bloque de apartamentos de Hong Kong con 36 vecinos afectados, lo que abre la posibilidad a que se propague también por conductos de ventilación. Además, se ha observado que unas personas contagian más fácilmente que otras. Como ejemplo, Heymann ha explicado que un solo paciente en Vietnam infectó a 21 miembros del personal sanitario de su hospital, incluidos los conductores de la ambulancia. Una de las medidas profilácticas que han puesto en marcha algunos países ha sido establecer controles en los aeropuertos para examinar a pasajeros procedentes de zonas afectadas por la enfermedad.
Sólo desde el pasado sábado, se han registrado 213 nuevos enfermos y han muerto 25 afectados en todo el mundo, según las cifras de la OMS. "El futuro de esta enfermedad no lo sabremos hasta que entendamos que está pasando en China", dado que es en este país donde se originó la enfermedad y pasó al ser humano, ha dicho Heymann, para quien la secuencia de contactos ya habría sido desvelada, pues se supone que el virus fue introducido el pasado mes de noviembre por un paciente en un hospital en la provincia China de Guangdong, de manera que el primer contagio detectado fue el de un empleado del centro.
Tras esta oleada de contagios, el virus se habría transmitido a Canadá y a otras zonas asiáticas, entre las que destaca la ciudad de Hong Kong por el alto número de casos, 1.190 enfermos y 47 fallecimientos. En la actualidad, la OMS ha pedido a los viajeros que, como precaución, cancelen sin dudarlo sus viajes a la provincia de Guangdong y demoren, en lo posible, los desplazamientos a Honk Kong. Dado que en la mayor parte de los 21 países donde se ha detectado la neumonía atípica, los casos están controlados y aislados, los esfuerzos internacionales se concentran ahora en China, donde se ha comenzado a trabajar en colaboración con el Gobierno de este país.
Otra de las incógnitas de la enfermedad es la forma de contagio, según Heymann, dado que hasta ahora se suponía que se necesitaba un "contacto cercano" para que el virus se propagara de una persona a otra. Sin embargo, esta teoría ha quedado en entredicho al aparecer un brote en un bloque de apartamentos de Hong Kong con 36 vecinos afectados, lo que abre la posibilidad a que se propague también por conductos de ventilación. Además, se ha observado que unas personas contagian más fácilmente que otras. Como ejemplo, Heymann ha explicado que un solo paciente en Vietnam infectó a 21 miembros del personal sanitario de su hospital, incluidos los conductores de la ambulancia. Una de las medidas profilácticas que han puesto en marcha algunos países ha sido establecer controles en los aeropuertos para examinar a pasajeros procedentes de zonas afectadas por la enfermedad.