
L D (EFE) Los científicos del Laboratorio de Propulsión a Chorro de la NASA en Pasadena (California) recibieron con gritos de alegría la señal de radio a las 04.30 del jueves (hora española) que indicaba que el robot había enviado con éxito el cohete, que emprendió un viaje de 96 minutos a través de los anillos hasta establecerse en órbita. Cassini pasará cuatro años en la órbita de Saturno para estudiar este planeta, sus anillos y algunas de las 31 lunas conocidas, entre ellas Titán, la de mayor tamaño.
Desde que fue lanzada en Cabo Cañaveral, hace siete años, la sonda ha realizado un viaje interplanetario en el que dejó atrás la Tierra, Venus y Júpiter. Al entrar en la órbita, la nave pasó a sólo 20.000 kilómetros de las nubes de Saturno y diez veces más cerca de sus misteriosos anillos que cualquier otro artefacto enviado por el hombre hacia el planeta. Para los más de 100 científicos de la NASA y de la Agencia Espacial Europea que han participado en el proyecto, Saturno representa un caudal de información que ha merecido esperar durante casi siete años.
Además de llevar consigo doce instrumentos que permitirán a los científicos estudiar la superficie del planeta, Cassini carga consigo la sonda Huygens, construida por la Agencia Espacial Europea. Con doce instrumentos de análisis espectroscópicos, cartográficos y geológicos, la Huygens estará dedicada especialmente al estudio de Titán, la única luna en el Sistema Solar que cuenta con su propia atmósfera.
