L D (EFE)
La Confederación Alemana de Servicios Sexuales (BSD), órgano de representación de las prostitutas alemanas y de las propietarias de burdeles, han solicitado la legalización de la situación laboral de sus colegas inmigrantes para que éstas puedan recurrir a los tribunales para defenderse de abusos. La presidenta de la BSD, Stephanie Klee, subrayó, que las prostitutas extranjeras son indispensables para el sector por diversos motivos. "Ya somos una sociedad multicultural y hay clientes que quieren estar con mujeres de su mismo origen o que procedan de lugares donde han estado de vacaciones o en viaje de negocios", explicó.
Klee se quejó además de que los medios de comunicación identifiquen el trabajo de las prostitutas extranjeras con el de la esclavitud sexual porque, según aseguró, la gran mayoría desempeñan su trabajo de manera voluntaria. Según la presidenta de la BSD, en las redadas policiales en las que han sido detenidas prostitutas extranjeras que trabajaban ilegalmente en Alemania se demostró que sólo un cinco por ciento habían sido obligadas a prostituirse. "Naturalmente hay que combatir la prostitución forzada pero precisamente por ello hay que legalizar la situación de las colegas inmigrantes para que puedan recurrir sin temor a los tribunales", dijo.
Otras quejas de las trabajadoras sexuales estuvieron relacionadas con la situación legal poco clara que sigue teniendo el sector pese a la aprobación relativamente reciente de una ley de regulación de la prostitución, que en algunos estados federados de fuerte tradición conservadora, como Baviera, suele ser interpretada de manera restrictiva.
Klee se quejó además de que los medios de comunicación identifiquen el trabajo de las prostitutas extranjeras con el de la esclavitud sexual porque, según aseguró, la gran mayoría desempeñan su trabajo de manera voluntaria. Según la presidenta de la BSD, en las redadas policiales en las que han sido detenidas prostitutas extranjeras que trabajaban ilegalmente en Alemania se demostró que sólo un cinco por ciento habían sido obligadas a prostituirse. "Naturalmente hay que combatir la prostitución forzada pero precisamente por ello hay que legalizar la situación de las colegas inmigrantes para que puedan recurrir sin temor a los tribunales", dijo.
Otras quejas de las trabajadoras sexuales estuvieron relacionadas con la situación legal poco clara que sigue teniendo el sector pese a la aprobación relativamente reciente de una ley de regulación de la prostitución, que en algunos estados federados de fuerte tradición conservadora, como Baviera, suele ser interpretada de manera restrictiva.