
L D (EFE) Los bomberos que se presentaron voluntarios a la misión, Medardo Tudela, subdirector general de Bomberos, Fernando Munilla, jefe del servicio de extinción de incendios, ambos arquitectos, y los subinspectores y arquitectos técnicos Juan Orellana, y Eugenio Amores, entraron a las nueve y cuarto de la mañana y salieron pasado el mediodía tras visitar 27 de las 28 plantas del edificio. "Hemos ido hasta la 28 pero no hemos podido abrir la puerta", dijo Tudela, "la estructura está bastante afectada y el núcleo central mantiene estabilidad relativa aunque hay partes muy dañadas y está en situación bastante inestable, hay zonas con riesgo alto".
Pertrechados de herramientas, comunicaciones y elementos de fijación y seguridad, comprobaron la accesibilidad y las vías de escape, así como el estado estructural antes de decidir si otros técnicos podían entrar. Tudela indicó que "hemos ido encontrando un deterioro paulatino conforme subíamos pero no podíamos acceder a algunas plantas que están cerradas o macizadas de escombros", y se mostró impresionado por el estado en que se halla el edificio y por el hecho de que "en las plantas superiores, nada más salir del núcleo de escalera", se veía que la planta en cuestión había desaparecido.
Ahora, el "equipo 2" de bomberos que acompaña a los técnicos de Control de la Edificación y a los policías de la investigación científica en el interior del edificio Windsor en sustitución de los primeros voluntarios que analizaron la estructura, buscan el origen del incendio. Así se establece en el protocolo que desde primeras horas de la mañana aplican los equipos de emergencia y que, hasta el momento, está siguiendo el ritmo previsto.
El segundo equipo, integrado por bomberos especialistas en arquitectura, siniestros, captación de datos y documentación -Pedro Gallardo, Joaquín Saez, Rafael Ferrándiz y Juan Padilla- acompaña desde primeras horas de la tarde a los técnicos de Control de la Edificación del Ayuntamiento y de la Policía Científica. Para facilitar que cualquier contingencia sea inmediatamente advertida, se han situado tres equipos de observación en sendas terrazas: en el edificio Estrella, del número 2 de la calle Orense y en el otro Estrella del número 4, y el tercero, en la cubierta de El Corte Inglés.
Mientras, los comerciantes afectados por el incendio del edificio Windsor -y los consiguientes cortes al acceso de posibles clientes- han anunciado que, por ahora, no pretenden reclamar de forma mayoritaria a sus aseguradoras ni a las administraciones públicas por la pérdida de beneficios.
Pertrechados de herramientas, comunicaciones y elementos de fijación y seguridad, comprobaron la accesibilidad y las vías de escape, así como el estado estructural antes de decidir si otros técnicos podían entrar. Tudela indicó que "hemos ido encontrando un deterioro paulatino conforme subíamos pero no podíamos acceder a algunas plantas que están cerradas o macizadas de escombros", y se mostró impresionado por el estado en que se halla el edificio y por el hecho de que "en las plantas superiores, nada más salir del núcleo de escalera", se veía que la planta en cuestión había desaparecido.

El segundo equipo, integrado por bomberos especialistas en arquitectura, siniestros, captación de datos y documentación -Pedro Gallardo, Joaquín Saez, Rafael Ferrándiz y Juan Padilla- acompaña desde primeras horas de la tarde a los técnicos de Control de la Edificación del Ayuntamiento y de la Policía Científica. Para facilitar que cualquier contingencia sea inmediatamente advertida, se han situado tres equipos de observación en sendas terrazas: en el edificio Estrella, del número 2 de la calle Orense y en el otro Estrella del número 4, y el tercero, en la cubierta de El Corte Inglés.
Mientras, los comerciantes afectados por el incendio del edificio Windsor -y los consiguientes cortes al acceso de posibles clientes- han anunciado que, por ahora, no pretenden reclamar de forma mayoritaria a sus aseguradoras ni a las administraciones públicas por la pérdida de beneficios.
