L D (EFE) Dicha misiva, de la que informaron este martes los Obispos de la Comisión Episcopal de Enseñanza y Catequesis que preside el Arzobispo de Toledo, Antonio Cañizares, comienza diciendo que "llega el momento de inscribir a vuestros hijos en la clase de religión en el colegio".
"Igual que en años anteriores, vuestros obispos os escribimos también en esta ocasión tan importante para la educación de niños y jóvenes", se añade en el primero de los cuatro párrafos de la carta. El resto de la misiva sigue así: "Vosotros valoráis mucho la clase de religión católica. La inmensa mayoría venís pidiendo esta enseñanza curso tras curso con plena libertad y constancia admirable. Os damos las gracias por el interés que demostráis en la formación completa de vuestros hijos".
"Este año, se han dicho muchas cosas inexactas y confusas sobre la clase de religión. No os dejéis confundir. Todo sigue básicamente igual para vosotros. Podéis, y bien sabéis que debéis inscribir a vuestros hijos en la clase de religión o, en su caso, procurar que ellos mismos se inscriban". "Que nadie os estorbe. Es vuestro derecho propio y constitucional. El Estado tiene la obligación de facilitaros el ejercicio real de este derecho fundamental, que a vosotros os asiste y a nadie perjudica".
"Igual que en años anteriores, vuestros obispos os escribimos también en esta ocasión tan importante para la educación de niños y jóvenes", se añade en el primero de los cuatro párrafos de la carta. El resto de la misiva sigue así: "Vosotros valoráis mucho la clase de religión católica. La inmensa mayoría venís pidiendo esta enseñanza curso tras curso con plena libertad y constancia admirable. Os damos las gracias por el interés que demostráis en la formación completa de vuestros hijos".
"Este año, se han dicho muchas cosas inexactas y confusas sobre la clase de religión. No os dejéis confundir. Todo sigue básicamente igual para vosotros. Podéis, y bien sabéis que debéis inscribir a vuestros hijos en la clase de religión o, en su caso, procurar que ellos mismos se inscriban". "Que nadie os estorbe. Es vuestro derecho propio y constitucional. El Estado tiene la obligación de facilitaros el ejercicio real de este derecho fundamental, que a vosotros os asiste y a nadie perjudica".
Para concluir, la carta dice lo siguiente: "El estudio de la religión en la escuela es un instrumento precioso para que los niños y los jóvenes crezcan en el conocimiento de todo lo que significa su fe, a la par que van desarrollando sus saberes en otros campos". "Comprenderán que creer en Dios ilumina las preguntas más profundas que ellos mismos llevan en el alma y que Jesucristo es la revelación plena del misterio de Dios y del camino del ser humano. Entenderán la cultura en la que viven, cuyos valores y expresiones artísticas y de todo orden hunden sus raíces en la fe cristiana", señala.
"Aprenderán a valorar lo bueno que hay en otras religiones y a respetar la dignidad sagrada de todos los hombres, creyentes o no. Adquirirán una visión armónica del mundo y de la vida humana que les capacitará para ser personas más felices y ciudadanos más libres y responsables, constructores de verdadera convivencia y de una sociedad en paz", agrega la carta.
"Aprenderán a valorar lo bueno que hay en otras religiones y a respetar la dignidad sagrada de todos los hombres, creyentes o no. Adquirirán una visión armónica del mundo y de la vida humana que les capacitará para ser personas más felices y ciudadanos más libres y responsables, constructores de verdadera convivencia y de una sociedad en paz", agrega la carta.