A lo largo de la ceremonia se colocó una placa en la fachada de la Real Casa de Correos, sede del Gobierno regional, tal y como se acordó en el transcurso de un Consejo de Gobierno extraordinario que se celebró el pasado lunes, 15 de marzo. En esta placa aparece bajo el título "La Comunidad de Madrid Agradecida" un texto en el que se elogia a los madrileños como "ejemplo de civismo, de solidaridad y de generosidad" y se hace mención expresa a todos los que prestaron ayuda a raíz del atentado y "mostraron un inolvidable apoyo" a la ciudad.
Representantes de cada uno de los servicios públicos que trabajaron en las labores de auxilio recibieron una escultura que simboliza, por un lado, el recuerdo a las víctimas y a sus familiares, y por otro, la fortaleza de todos aquellos que prestaron su ayuda en ese día tan trágico para la historia de la Comunidad de Madrid. La celebración de este acto de homenaje se completó con la interpretación del Réquiem Aeternam y del aria Lacrimosa de Mozart, y con una ofrenda floral por las víctimas.