L D (EFE) Ana Palacio, que regresará a Madrid este mismo jueves, se trasladó desde el aeropuerto de Rabat-Salé al domicilio particular de Mohamed Benaissa, donde se celebrará una reunión entre los miembros de las dos delegaciones seguida de una cena.
A su llegada al aeropuerto de la capital marroquí, Ana Palacio destacó la "importancia" de las últimas medidas adoptadas por las autoridades marroquíes para luchar contra la inmigración irregular y señaló que "a partir de ahí tenemos que establecer los mejores y más estrechos cauces de cooperación". Palacio dijo que "la inmigración, sobre todo la inmigración ilegal, pero también la integración de los inmigrantes en las sociedades de acogida, son asuntos que trascienden a las relaciones entre Marruecos y España".
Destacó que la cumbre bilateral del próximo mes de diciembre no sólo servirá para abordar el problema de la inmigración, sino que tendrá otros capítulos muy importantes, como el político, el económico o el cultural. "Hay una previsión de un importante capítulo económico en la reunión de alto nivel y los ministerios de Economía de los dos países están cerrando los últimos detalles", explicó.
La delegación española que acompaña a Ana Palacio está formada también por el director general para el Mediterráneo Oriental, Oriente Medio y Africa, Gabriel Busquets; el director general de Cooperación de este área, Antonio Pérez Hernández, el director de la Oficina de Información Diplomática, Juan María Alcina, y la jefa de gabinete de la ministra, Elena Segura. La delegación marroquí está integrada por los directores generales de Asuntos Multilaterales, Asuntos Bilaterales, Asuntos Europeos y Asuntos Culturales del ministerio de Asuntos Exteriores.
Aunque el Tratado de Amistad que España y Marruecos firmaron en 1991 prevé la celebración anual de una reunión de alto nivel presidida por los jefes de gobierno, ésta no se celebra desde abril de 1999 (Madrid) debido a diferentes litigios entre los dos países.
A su llegada al aeropuerto de la capital marroquí, Ana Palacio destacó la "importancia" de las últimas medidas adoptadas por las autoridades marroquíes para luchar contra la inmigración irregular y señaló que "a partir de ahí tenemos que establecer los mejores y más estrechos cauces de cooperación". Palacio dijo que "la inmigración, sobre todo la inmigración ilegal, pero también la integración de los inmigrantes en las sociedades de acogida, son asuntos que trascienden a las relaciones entre Marruecos y España".
Destacó que la cumbre bilateral del próximo mes de diciembre no sólo servirá para abordar el problema de la inmigración, sino que tendrá otros capítulos muy importantes, como el político, el económico o el cultural. "Hay una previsión de un importante capítulo económico en la reunión de alto nivel y los ministerios de Economía de los dos países están cerrando los últimos detalles", explicó.
La delegación española que acompaña a Ana Palacio está formada también por el director general para el Mediterráneo Oriental, Oriente Medio y Africa, Gabriel Busquets; el director general de Cooperación de este área, Antonio Pérez Hernández, el director de la Oficina de Información Diplomática, Juan María Alcina, y la jefa de gabinete de la ministra, Elena Segura. La delegación marroquí está integrada por los directores generales de Asuntos Multilaterales, Asuntos Bilaterales, Asuntos Europeos y Asuntos Culturales del ministerio de Asuntos Exteriores.
Aunque el Tratado de Amistad que España y Marruecos firmaron en 1991 prevé la celebración anual de una reunión de alto nivel presidida por los jefes de gobierno, ésta no se celebra desde abril de 1999 (Madrid) debido a diferentes litigios entre los dos países.
