Un juez de Santander ha condenado a un año de cárcel a un hombre que colgó en una página de acceso libre de la red social de internet "Tuenti" catorce fotografías en las que su ex novia aparecía desnuda.
efe
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berdonio dijo el día 30 de Noviembre de 2009 a las 18:52:
Solo un apunte informativo. No es cierto que no ingresará en prisión a menos que vuelva a delinquir. Léanse la antiley de violencia de género que reforma el Código Penal. También podría ir a la cárcel si se negara a realizar lo que llaman un “programa formativo” de adoctrinamiento ideológico. Y la cosa no es baladí, porque se trata de una flagrante violación de un derecho fundamental como es el de libertad ideológica.
La cosa es análoga a si sacaran una ley de violencia empresarial que culpara al capitalismo de la opresión de la clase trabajadora. Tal ley podría penalizar más una agresión de un empresario a un empleado que al revés y considerar al primero un presunto culpable porque ya se sabe que los empresarios llevan el mal y la explotación en la sangre. Hasta aquí, vale; promulgan una ley que, supongamos, el TC considera constitucional (aunque evidentemente no lo es) y que hay que acatar. ¿Qué pensaríamos si la ley estipulara una “formación” obligatoria en socialismo para el reo de violencia empresarial? Una cosa es penar más al empresario por el hecho de serlo o considerarlo presunto culpable, pero ¿tratar de obligarlo a convertirse al socialismo? La cosa rechina un poco y no parece muy democrática, ¿verdad? Pues, mutatis mutandis, estamos en lo mismo y nadie parece percatarse. Bien vamos.
Solo un apunte informativo. No es cierto que no ingresará en prisión a menos que vuelva a delinquir. Léanse la antiley de violencia de género que reforma el Código Penal. También podría ir a la cárcel si se negara a realizar lo que llaman un “programa formativo” de adoctrinamiento ideológico. Y la cosa no es baladí, porque se trata de una flagrante violación de un derecho fundamental como es el de libertad ideológica.
La cosa es análoga a si sacaran una ley de violencia empresarial que culpara al capitalismo de la opresión de la clase trabajadora. Tal ley podría penalizar más una agresión de un empresario a un empleado que al revés y considerar al primero un presunto culpable porque ya se sabe que los empresarios llevan el mal y la explotación en la sangre. Hasta aquí, vale; promulgan una ley que, supongamos, el TC considera constitucional (aunque evidentemente no lo es) y que hay que acatar. ¿Qué pensaríamos si la ley estipulara una “formación” obligatoria en socialismo para el reo de violencia empresarial? Una cosa es penar más al empresario por el hecho de serlo o considerarlo presunto culpable, pero ¿tratar de obligarlo a convertirse al socialismo? La cosa rechina un poco y no parece muy democrática, ¿verdad? Pues, mutatis mutandis, estamos en lo mismo y nadie parece percatarse. Bien vamos.