(Libertad Digital) Después de que la Generalidad de Cataluña expulsara a la Guardia Civil de esta comunidad autónoma par pedir más tarde que regresara ante la ola de asaltos a viviendas, continúan apareciendo nuevos casos de atracos violentos a urbanizaciones catalanas.
En esta ocasión, pasadas las cinco de la tarde, la propietaria de una vivienda perteneciente a una urbanización del municipio tarraconense de Segur de Calafell, descubrió a tres individuos con pasamontañas en el patio. Al parecer no iban armados, pero uno de ellos le golpeó violentamente en la espalda y le obligó a indicar dónde se encontraba la caja fuerte, de la que sustrajeron gran cantidad de joyas y dinero.
Los agentes de la benemérita ya están detrás de la pista de estos criminales. El pasado viernes la Guardia Civil detuvo a 17 miembros de otra banda dedicada al asalto de Chalets, esta vez en Valencia, a quienes incautaron un subfusil ametrallador con silenciador. Los arrestados, eran en su mayoría colombianos.
Los consejos de la Generalidad
Cuando los primeros casos de violencia criminal en viviendas de urbanizaciones catalanas saltaron a la luz pública, activaron la alarma entre los vecinos de dichas comuniades de propietarios. Para calmar su miedo, la Consejera de Interior de la Generalidad, Monserrat Tura aconsejó a los propietarios que sufrían los asaltos que invirtieran en seguridad privada y que tuvieran más "precaución".
Más tarde, el propio presidente de la Generalidad, Pascual Maragall, no dudó en echarle la culpa de la creciente ola de asaltos en Cataluña a la marcha de la Guardia Civil de esa comunidad autónoma, que él mismo había solicitado, y aseguró que "está en la propia psicología del cuerpo" abandonar antes de tiempo Cataluña.