L D (EFE) En la inauguración del seminario "El Tráfico de Mujeres y la Prostitución", Zaplana dijo que la prostitución es una forma "execrable" de violencia contra la mujer, definición compartida por la concejala de Servicios al Ciudadano de Madrid, Ana Botella, quien informó de la preparación de un "plan transversal" del Ayuntamiento, donde se incluirá "la posibilidad de formación y ayuda a mujeres que quieran dejar" la actividad.
El titular de Trabajo y Asuntos Sociales indicó que en la legislatura que acaba de finalizar una ponencia parlamentaria sobre esta cuestión recomendó la redacción de un plan integral, "que a buen seguro se acometerá en la próxima legislatura". Dicha actuación contemplará sancionar "más duramente" a los responsables de explotación sexual y proteger "más eficazmente" a la víctimas, añadió Zaplana en el acto, organizado por la embajada de Suecia en España, el Instituto Sueco y el Ayuntamiento de Madrid, al que asistió también la ministra sueca de Democracia, Integración y Asuntos de Igualdad de Género, Mona Sahlin.
En este contexto, Zaplana recordó que Suecia ha introducido una serie de innovaciones en el ámbito del tráfico de mujeres y menores y de la prostitución, como la tipificación de delito de la compra o intento de compra de servicios sexuales, castigado con multas o penas de cárcel de hasta seis meses, y la traslación de responsabilidades al cliente de la prostituta. Desde la entrada en vigor de la Ley de Prohibición de Compra de Servicios Sexuales, en 1999, se ha producido un drástico descenso en la prostitución de mujeres en la calle, según datos de la policía y los servicios sociales suecos.
El titular de Asuntos Sociales demandó luchar enérgicamente contra este tipo de violencia ejercida contra la mujer y se refirió a la necesidad de sensibilizar a la sociedad, erradicar el turismo sexual, buscar mecanismos de reinserción para este colectivo y mejorar la cooperación entre las administraciones (local, autonómica y central).
Por otro lado, Ana Botella se opuso a que la prostitución sea una profesión reglada y destacó que más del 90 por ciento de las mujeres que se dedican a esta actividad son inmigrantes, están retenidas y son explotadas por organizaciones criminales. Tras afirmar que la investigación, el análisis y la adopción de medidas en este tema es una de las prioridades de la agenda política del Ayuntamiento de Madrid, Botella calificó la prostitución como la "esclavitud del siglo XXI" y llamó la atención respecto a que el tráfico de seres humanos no podría prosperar sin la existencia de un mercado local donde hay hombres dispuestos a comprar y vender sexo.
Anunció además la preparación de un plan transversal desde todas las concejalías del Ayuntamiento de Madrid, entre cuyos objetivos figurarán la consecución de "un cambio de mentalidad"; la posibilidad de formación y ayuda a las mujeres que abandonen la actividad y actuaciones de colaboración con las ONG.