
El caos se desató en la estación de Feve en Santander a primera hora de la mañana de este jueves, cuando un vigilante de seguridad en un aparente estado de enajenación comenzó a destrozar el mobiliario del recinto con una maza de grandes dimensiones. Pasajeros y trabajadores presenciaron la escena con estupor, mientras el hombre golpeaba violentamente puertas, tornos y oficinas de la estación.
Los hechos ocurrieron en torno a las 8:30 horas, momento en el que varias patrullas de la Policía Nacional acudieron al lugar tras recibir un aviso de la situación. Según ha informado el cuerpo policial a Europa Press, a su llegada los agentes se encontraron con el vigilante en un estado alterado, tras haber causado cuantiosos destrozos en el recinto ferroviario.
🚨 BRUTAL | Un vigilante de seguridad de la estación de FEVE desata el caos, destrozando todo a su paso frente a la policía.
Imágenes impactantes de una violencia descontrolada en pleno servicio. ¿Qué está pasando con la seguridad en el transporte público?
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— eldiarioalerta.com (@ALERTAeldiario) February 20, 2025
En algunos de los vídeos grabados por testigos se puede escuchar al hombre gritar: "No funciona nada como tiene que funcionar", mientras golpeaba con furia el mobiliario. Según explicaron fuentes policiales a Diario Montañés, el individuo no llegó a atacar directamente a ninguna persona, pero su actitud generó momentos de pánico entre los presentes. Uno de los testigos describió la escena al citado medio: "Casi todos salimos de allí porque el grado de violencia del tipo era brutal".
Antecedentes recientes
Todavía no se ha esclarecido qué motivó este estallido de violencia. Sin embargo, compañeros del servicio han apuntado que el hombre se había reincorporado recientemente tras un periodo de baja, aparentemente debido a problemas personales.
Cuando los agentes de la Policía Nacional llegaron a la estación, el vigilante cesó su actitud sin oponer resistencia y fue detenido por los daños ocasionados. Según ha adelantado el cuerpo policial a Europa Press, Renfe tiene previsto interponer una denuncia por los destrozos en sus instalaciones. Por su parte, la compañía ferroviaria ha confirmado a Diario Montañés que el detenido no forma parte de su plantilla directa, sino que trabaja para una empresa subcontratada de seguridad.

