El cuerpo sin vida de Óscar Omar Hernández Bautista, el menor de 13 años desaparecido el 28 de marzo de 2025 en Los Ángeles (Estados Unidos), fue localizado el pasado 2 de abril en el margen de una carretera de Oxnard, en el condado de Ventura, a unos 100 kilómetros de la casa del conocido al que había ido a ver, en Lancaster. Así lo ha confirmado su familia, que es originaria de Honduras.
La madre, visiblemente afectada, ha señalado —en declaraciones a ABC News— que lo trataron "como a un animal". El fiscal de distrito del condado de Los Ángeles, Nathan Hochman, ha explicado que el pasado lunes —7 de abril— se presentaron los cargos contra el entrenador de fútbol del menor, Mario Edgardo García Aquino, a quien las autoridades consideran responsable del crimen.
El rastro del adolescente se perdió el día en el que fue a visitar al hombre, de 44 años. Esto le convirtió en el principal sospechoso desde el principio. Los agentes a cargo de la investigación de la desaparición del menor lo arrestaron la semana pasada en relación con los presuntos abusos sexuales a un varón de 16 años en 2024. Es decir, por hechos no relacionados con el asesinato de Óscar.
Su detención terminó llevando a los agentes hasta el lugar donde García Aquino habría abandonado el cadáver su alumno. Aunque Hochman no ha ofrecido más detalles los hechos, ha dado a entender que la víctima fue abusada sexualmente. "Ningún padre debería tener que soportar el dolor y la tristeza inimaginables de enterarse del asesinato de su hijo", ha dicho. "Los depredadores sexuales", ha añadido, "serán procesados con todo el peso de la ley".
Otras víctimas
Ahora las autoridades buscan otras posibles víctimas del entrenador arrestado, que aún no ha comparecido ante el juez por causas médicas, teniendo en cuenta que trabajaba habitualmente con menores. El jefe del Departamento del Alguacil del Condado de Los Ángeles (LADS), Robert Luna, ha apuntado que García Aquino era entrenador del Hurricane Valley Boy Soccer Club, en Sylmar.
Precisamente su posición de entrenador le permitió acercarse al varón de 16 años que habría denunciado los abusos por los que fue arrestado la semana pasada. Según ha explicado Luna, se hizo amigo de una familia de la zona y esto derivó en que el menor se quedara a dormir en su casa de Palmdale. La familia del chico reportó que el adolescente había sido agredido.
Cuando los agentes del LASD iniciaron las averiguaciones, descubrieron que había una denuncia similar contra García Aquino —de 2022— que estaba siendo investigada por el Departamento de Policía de la división de Foothill. Luna ha pedido a quienes pudieran ser víctimas de García Aquino o tener información al respecto que se comuniquen con las autoridades. "No tengan miedo", ha exclamado.