La policía de Dalton ha descubierto la conexión existente entre los crímenes de dos mujeres que se habrían producido con diferencia de horas en puntos opuesto de la ciudad, ubicada en el estado de Georgia (Estados Unidos). Las víctimas eran la mujer y la novia de un mismo hombre: Kevin Andrew Akins, de 37 años. Él las habría matado a ambas y se habría suicidado después. Así se desprende de la investigación iniciada tras la desaparición de Rebeca Nicole Akins, de 35 años.
Su marido le disparó mortalmente durante la madrugada del miércoles 21 de mayo en la vivienda que compartían, en el número 1320 de Murray Avenue. Aunque su cuerpo no se encontró hasta el viernes, cuando los compañeros de la mujer dieron aviso a la policía. Llevaba tres días sin acudir a su puesto de trabajo, sin haber dado explicación alguna. Tampoco habían logrado contactar con ella, en ese tiempo.
Cuando los agentes acudieron el viernes por la tarde al domicilio para realizar una visita de control de bienestar (comprobar que si se encuentra bien), nadie les abrió la puerta. Los responsables del complejo les permitieron el acceso y encontraron a la mujer muerta en el suelo, con una herida de bala en la cabeza. Las grabaciones de la cámara de videovigilancia revelaroon que la última persona que salió de la vivienda fue su esposo.
Según las imágenes, Kevin Andrew Akins abandonó el inmueble a las seis de la mañana del miércoles con su vehículo. El varón condujo varias millas hasta llegar a Shadow Lane, la calle en la que vivía una mujer —Cindel Mae Rhoden, de 33 años— con la que él había estado saliendo. El rastreo de su coche llevó a los agentes del caso hasta el aparcamiento del complejo de apartamentos.
Ahora saben que el presunto asesino subió a casa de su novia —embarazada y madre soltera de dos hijos— la mató y a continuación se suicidó. Mientras esperaban la llegada de la orden de registro apostados en el parking, vieron a un hombre entrar en el domicilio de Cindel Mae. Era el padre de la mujer, que acudió a la vivienda tras varios días sin saber nada de ella. Como no le abrió la puerta, entró con su llave y encontró dos cadáveres con impactos de bala.
El móvil de los asesinatos
Uno era el de su hija. El otro correspondía a un hombre. El padre de la mujer llamó a la policía e informó del terrible hallazgo. El varón era Kevin Andrew Akins, quien habría matado a la mujer con la que salía para suicidarse después. La policía no ha confirmado el móvil. Pero familiares de la segunda víctima han asegurado en distintas plataformas en Internet que sabían desde hacía poco tiempo que ella estaba embarazada.
Ellos creen que este habría sido el motivo que llevó a su novio a cometer los asesinatos, tres si contamos la vida del bebé no nacido. Un niño que debía nacer en el mes de septiembre (se encontraba en su quinto mes de gestación) y que ya estaba muerto cuando el padre de Cindel encontró el cadáver de la mujer, que se cree fue asesinada el mismo día Rebeca Nicole Akins. Su novio le habría disparado poco después de entrar en su residencia, el miércoles anterior.