
La doble tragedia en Mijas, Málaga, ha dejado en vilo a toda una población durante la última semana. La autopsia realizada a Raúl Heredia, el hombre de 41 años que fue hallado sin vida en una arqueta, ha determinado que su fallecimiento es compatible con una caída accidental al sistema de alcantarillado.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha señalado que el cuerpo presenta traumatismos que los forenses consideran compatibles con una caída y que no hay signos de heridas de arma blanca o de fuego provocadas por terceros.
El delegado ha remarcado que aún se están analizando otros resultados complementarios, pero ha insistido en que no se han detectado indicios de violencia externa. Fuentes cercanas a la investigación, citadas por la agencia EFE, han precisado que la autopsia apunta a un traumatismo severo en la parte frontal del cuerpo, compatible con un impacto al caer dentro de la arqueta.
En este sentido, el informe forense califica la muerte de "violenta pero accidental", una expresión técnica que hace referencia a causas no naturales, pero sin la intervención de otra persona, según los datos.
Un intento fallido de venganza
Tras ser hallado por la Guardia Civil el cadáver sin vida de Raúl Heredia, el hijo de la víctima, Francisco, fue detenido como presunto autor del asesinato del primo de su padre, Fernando Campos –un vecino de 57 años–, ya que creía que estaba implicado en la muerte de su progenitor.
Francisco utilizó un arma de fuego para acabar con la vida del que creía culpable. Huyó inicialmente y se refugió en una vivienda cercana, aunque poco después se entregó a los agentes, que ya lo esperaban. El arma homicida también fue recuperada esa misma tarde.
El Juzgado de Instrucción número 3 de Fuengirola ha ordenado este viernes prisión provisional, comunicada y sin fianza para Francisco Heredia, que está siendo investigado por un presunto delito de homicidio y tenencia ilícita de armas tras la muerte de Fernando. El detenido ha declarado ante la jueza de guardia, que seguirá al frente de la investigación, mientras un amplio dispositivo de la Guardia Civil ha reforzado la seguridad en los juzgados durante su comparecencia.
Tensión en la barriada tras conocerse el asesinato de Fernando
El asesinato de Fernando ha provocado un aumento de la tensión en la zona, donde familiares del hombre tiroteado han salido a la calle para pedir justicia, acompañados por numerosos vecinos. La situación ha obligado a desplegar refuerzos policiales, después de que algunas personas intentaran acceder a la vivienda de los familiares de Heredia con intención de vaciarla y advertirles de que no regresaran al lugar.
Ahora la familia de Fernando pide justicia por su cruel asesinato. La sobrina de Raúl expresó en el programa de Antena 3, ‘Espejo Público’: "Tienes que morir, Fran. Te tiene que llegar la muerte más grande". Tras todos estos altercados, la Guardia Civil se ha visto obligada a blindar el barrio, aunque ya está controlado y bajo vigilancia mientras continúa la investigación.
Un amplio despliegue de la Guardia Civil se ha mantenido este viernes tanto en los juzgados de Fuengirola, donde se encontraba detenido el hijo de Raúl Heredia, como en el cementerio de Mijas, donde ha sido enterrado Fernando Campos.
Investigación abierta: alcantarillado y narcotráfico
Fuentes de la investigación han apuntado que, según los primeros indicios, el sistema de alcantarillado de la barriada podría haber sido utilizado por algunos vecinos para entrar y salir de forma clandestina, en relación con actividades vinculadas al narcotráfico.
Se investiga si Raúl Heredia habría accedido voluntariamente al sistema de alcantarillado para esconderse tras un presunto "vuelco" de 30 gramos de cocaína, es decir, una operación de sustracción de droga entre implicados en este tipo de delitos. Este contexto forma parte de las líneas abiertas por los investigadores, que no descartan nuevas actuaciones a medida que avancen los análisis forenses y las diligencias policiales.


