
Los aeropuertos valencianos se quedan pequeños. Tanto el de Alicante como el de Valencia han cerrado 2023 con récord de pasajeros, y aún así el Gobierno de Sánchez niega lo evidente al considerar que estos todavía "cuentan con la capacidad suficiente para operar con normalidad" y sus ampliaciones "no son necesarias". Pero los datos dicen lo contrario. En concreto, el aeropuerto capitalino ya en 2022 alcanzó el volumen que el Ministerio de Transportes preveía para 2026, y ahora un informe revela que para este año, alcanzará su nivel de saturación.
El estudio, realizado por el Consejo de Cámaras de Comercio de la Comunidad Valenciana y promovido por la Generalidad, surgió, precisamente, para demostrar que las infraestructuras de Valencia sí requieren de una ampliación para hacer frente al tránsito de pasajeros actual y futuro. El documento se ha presentado días después de que Aena anunciase la "expansión" del aeropuerto durante una junta de accionistas, pero sin dar mayor detalle de cuándo o cómo.
Así que, el Gobierno valenciano no va a desistir en sus reivindicaciones, y menos aún con unos datos que acreditan la necesidad operativa de una infraestructura mayor. Es por ello, que el presidente de la Generalidad, Carlos Mazón, y la alcaldesa de Valencia, María José Catalá, han reprochado la "falta de concreción" del Gobierno de Sánchez y Aena ante la "urgencia" de una actuación que ha quedado "acreditada" y cuyo coste de oportunidad supondría pérdidas "millonarias" para la economía valenciana en "lucro cesante".
El ‘Estudio del Impacto Económico de la Ampliación del Aeropuerto de Valencia’ revela que esta permitiría la llegada de 17,3 millones de pasajeros anuales en 2030, un impacto total sobre la renta provincial de más de 933 millones de euros anuales en el periodo 2024-2030 y unos ingresos de 1.080 millones de euros anuales, que estarían en riesgo si no se aumenta la capacidad de la infraestructura. Además, el documento cifra en 17.483 empleos al año los que dejarían de crearse sin la actuación.
"Cada día que pase sin que Valencia amplíe mejor su capacidad aeroportuaria es una oportunidad perdida para la Comunidad Valenciana", explica Mazón, para quien esta inversión está al nivel de importancia de otras infraestructuras como el Corredor Mediterráneo o la ampliación del puerto de Valencia.
Para el presidente de la Generalidad, con el informe del Consejo de Cámaras "queda suficientemente acreditada" la necesidad de ampliar el aeropuerto. Explica que este documento es una "guía maestra y estratégica en los pasos que dará el Consell" para continuar reivindicando esta infraestructura. Así, ha indicado que la consejera de Infraestructuras, Salomé Pradas, acudirá con este estudio el 9 de mayo a reunirse con la dirección de Aena.
Mazón pide a Pedro Sánchez "certezas, calendario y concreciones a quien tiene las competencias" en esta materia, porque "la Comunidad Valenciana no puede seguir sumando incógnitas", y que solicita al Gobierno de España que asuma la posición que le corresponden.
El presidente autonómico critica la falta de seriedad, concreción y de confirmación formal, "no tenemos ni siquiera una mesa para trabajarlo", y que por el momento, sólo tienen la cita con Aena para presentar el informe. "Unos del Ministerio no dicen nada, otro día dicen que no, al día siguiente un directivo dice que se puede estudiar, y lo dice en una junta de accionistas, nos hablan del periodo de estudios 2027-2031, o sea que como pronto tendríamos aeropuerto en el 2040 y no nos podemos llevar esta necesidad a la próxima década".
Ante esta situación de incertidumbre, Mazón asegura que en el Consell no estarán "donde han estado otros, en el terreno del conformismo, de bajar los brazos, de la docilidad, de ser mudos y callarnos". Del mismo modo, llama a la unidad en la reivindicación, tanto para la ampliación del aeropuerto de Valencia como para la segunda pista del aeropuerto de Alicante-Elche Miguel Hernández, sobre el que se dará a conocer un estudio similar el 8 de mayo, un día antes de la reunión con Aena.
Asegura que "ya van tarde" para atender el tráfico de ambas infraestructuras, y que el no actuar en 2024 "es una irresponsabilidad que no vamos a consentir porque supondría tener los dos aeropuertos internacionales colapsados".

