La suspensión del Gran Premio de Valencia de motociclismo se confirmó hace unos días debido a los estragos causados por las recientes inundaciones en la Comunidad Valenciana. Este martes se han difundido imágenes aéreas del circuito Ricardo Tormo de Cheste, en las que se observa que, aunque la pista se encuentra en condiciones relativamente buenas, los accesos, áreas de estacionamiento y otras infraestructuras han quedado gravemente afectadas.
Los daños en las zonas aledañas del circuito hacen inviable la realización del evento, ya que los caminos de acceso y el parking para los miles de aficionados que asisten cada año están prácticamente intransitables. Ante esta situación, los organizadores han decidido que el último Gran Premio de la temporada se celebrará en el circuito de Montmeló, en Barcelona.
La cancelación del Gran Premio en Cheste representa un golpe para la economía local, que cada año recibe a miles de visitantes atraídos por el evento. Las autoridades de la Comunidad Valenciana y los organizadores del campeonato han lamentado la decisión, aunque reconocen que la seguridad y la logística son prioritarias. Los equipos de reparación ya están trabajando en el circuito para evaluar el tiempo necesario para restaurar los accesos y preparar el recinto para futuras competiciones.

