
La periodista que comió con el presidente de la Generalidad Valenciana el pasado 29 de octubre de 2024 en el Restaurante El Ventorro, Maribel Vilaplana, ha roto su silencio después de diez meses respecto a su encuentro, que ha sido utilizado por la izquierda para azuzar el movimiento contra Carlos Mazón por su gestión de la DANA.
Según ha explicado en un escrito remitido a los medios de comunicación, la comida con el líder de los populares valencianos "fue una maldita coincidencia y un horrible golpe de mala suerte", ya que el día en el que se encontraron se produjo el temporal que acabó con la vida de 228 personas. Aquel día, Mazón se levantó para atender algunas llamadas, sin embargo, este no trasladó a Vilaplana el contenido de las mismas.
La versión de la periodista defiende que Mazón no le trasladó "ninguna inquietud al respecto" del temporal y que salieron del restaurante entre las 18:30 y las 18:45 horas. Algo sobre lo que se ha especulado en numerosas ocasiones en el marco de una comida que la izquierda ha utilizado para criticar a Mazón.
Por ello, Vilaplana ha denunciado que las formaciones políticas y los medios de comunicación contrarios al presidente de la Generalidad la han usado a ella convirtiéndola "en una diana utilizada políticamente y alimentada con insinuaciones machistas". Una persecución que ha durado diez meses y que la ha puesto bajo "una presión insoportable". La periodista ha detallado que esta persecución la llevó a un ingreso hospitalario y actualmente está en tratamiento psicológico por estrés postraumático.
En numerosas ocasiones, el PSOE de la Comunidad Valenciana, Diana Morant, ha hecho referencia a la comida de "El Ventorro" acusando a Mazón de estar en una reunión personal y no de trabajo minutos antes de que comenzaran las riadas. Los socialistas valencianos incluso han llegado a deslizar que Mazón y Vilaplana podrían tener una relación personal.



