Un solitario gol de Giampaolo Pazzini, en el minuto 84, ante Eslovenia ha dado a la selección italiana la clasificación matemática para la Eurocopa de Polonia y Ucrania, a falta de dos partidos para que finalice la ronda previa. No podía ser de otra manera, en los últimos minutos y sufriendo.
A falta de seis minutos para el final del partido, Pazzini aprovechó un rebote de la defensa eslovena para anotar el gol 700 de la historia de la selección italiana, que hoy protagonizó un partido lleno de altibajos e imprecisiones, que pudieron costarles muy caro a los chicos de Cesare Prandelli.
De hecho, Italia volvió a demostrar sobre el terreno de juego que el gol es una de sus asignaturas pendientes, ya que durante todo el partido, a pesar del claro dominio en el juego, fue incapaz de materializar ocasiones de gol clarísimas, como la que tuvo en el minuto 1 el delantero del Villarreal Giuseppe Rossi, mucho más activo que en el partido del pasado viernes contra las Islas Feroe.
Inglaterra y Francia, a punto
La selección inglesa se ha impuesto en Wembley a Gales, con un gol del jugador del Manchester United Ashley Young, en un partido en el que los galeses disfrutaron de muy pocas oportunidades y que sitúa al combinado que entrena Fabio Capello a un paso de la clasificación para la Eurocopa de 2012.
Inglaterra, con 17 puntos, aventaja por 6 al segundo clasificado del grupo G, Montenegro, que todavía tiene que jugar dos encuentros, uno de ellos precisamente contra los de Capello.
Por otra parte, la líder Francia logró sacar un punto (0-0) de Bucarest y deja a Rumanía virtualmente fuera de la Eurocopa de 2012 en el partido que servía para inaugurar el Estadio Nacional de Bucarest.
Arda Turan, el verdugo
La selección de Turquía ha dejado escapar la oportunidad de asentarse con claridad en el segundo puesto del grupo B al fallar el atlético Arda Turan un penalti en el último minuto del encuentro con Austria.
Turan, erigido en héroe nacional al marcar en el minuto 94 el gol de la victoria de su selección contra Kazajistán el pasado fin de semana, facilitó hoy la parada del portero Pascal Grünwald con un disparo raso y por el centro cuando el partido estaba casi liquidado. El penalti cometido por Grünwald a Burak Yilmaz fue muy claro y el colegiado español Undiano Mallenco no dudó en pitar la pena máxima en Viena con el tiempo casi cumplido.
Aún así, este empate permite a Turquía seguir segunda con dos puntos de ventaja sobre Bélgica en la lucha para entrar en la repesca para la Eurocopa, ya que el primer puesto lo tiene con claridad la talentosa Alemania de Mesut Özil.