Fernando Torres, delantero español del Chelsea inglés, ha hecho un repaso de la temporada que acaba de finalizar con la conquista de la Liga de Campeones y pese a haber tenido un año "muy complicado" en lo personal, asegura que "nunca" se ha rendido y que "nunca" lo hará.
"En el Chelsea estoy muy feliz y nunca he dicho lo contrario. Aún tengo mucho que hacer en este club, cumplir objetivos personales, confianza que devolver y cariño que agradecer. Ha sido un año muy complicado, he jugado poco y mi estado de ánimo era como una montaña rusa. Lo he pasado mal, muy mal y no me gustaría sentirme así otra vez. Pero nunca me he rendido y nunca lo haré", dijo Torres en declaraciones en su página web personal.
En este sentido, la salida del equipo de Didier Drogba parece dejar más margen de actuación al madrileño. "Didier es una leyenda del club y lo que ha decidido es respetable. Sólo puedo desearle lo mejor y sentirme orgulloso de haber compartido tantas cosas con él. Quiero jugar con los mejores y él es uno de los mejores. No entiendo por qué tiene que ser uno u otro y no los dos juntos", indica Torres.
El delantero no tenía claro su futuro, pero una conversación con los dueños del club parece haberlo cambiado todo. "Mi objetivo era hablar con ellos a final de temporada, necesitaba saber qué planes tenían para mí. Ya hemos hablado y ahora no tengo dudas de lo que esperan de Fernando Torres. Sólo quiero que ya empiece la temporada que viene", explica. "Cuando ganas siempre quieres más y más. A nivel personal quiero volver a mis registros goleadores y seguir devolviendo a la afición todo lo que me han dado con goles y títulos", continúa.
Torres no huye de la autocrítica de una temporada tan irregular. "No hemos estado a la altura en momentos clave. Cuando nos dimos cuenta, era muy tarde para casi todas las competiciones y sólo restaban las Copas, porque la Liga ya estaba perdida. Los jugadores somos los únicos responsables", indica.
También hizo Torres balance a título individual. "Tuve un bloqueo mental, lo pasé muy mal. Me sentía muy bien en el campo porque esta temporada me he convertido en un jugador más completo, pero la pelota no entraba y sentía que nunca estaba en la posición correcta", apunta. "Vi muchos vídeos para estudiar los movimientos de otros delanteros, incluso míos de mis etapas en el Atlético y en el Liverpool. Me ayudó mucho porque le perdí el miedo a estar en el área. Considero que he merecido jugar más. Por eso, para el futuro espero ganarme la confianza del entrenador con trabajo y no pararé hasta conseguirlo", añade.
Torres también habló de que hubo momentos en que perdió la ilusión. "Nunca me había pasado antes. Es la peor sensación del mundo cuando amas tu profesión. Me convertí en el jugador que yo odiaría. Por suerte forma parte del pasado. Ahora solo tengo en la cabeza cumplir sueños", comenta.
El fútbol es contradictorio con malos momentos personales y al tiempo los primeros títulos con el club. "El fútbol es así y por eso es tan bonito. Nunca sabes qué va a pasar el día siguiente. Este año he aprendido más cosas que nunca. Da para escribir un libro", dice.
Además, Torres se medirá al Atlético en la Supercopa de Europa. "Sentimentalmente cuento los días que quedan para este partido. Ganaré pase lo que pase. Espero poder jugar y que no me ocurra como en ocasiones anteriores. Será extraño, pero a la vez precioso", concluyó.