El ministro, que hoy ha participado como invitado en el foro Tribuna Barcelona, ha asegurado que "antes de que acabe el año" hará pública su propuesta de nuevo modelo de gestión aeroportuaria, que prevé consensuar "con todos los sectores implicados".
Es por ello que Blanco se ha comprometido a impulsar en breve un "proceso de diálogo y concertación" con la Generalitat, pero también con las instituciones empresariales y financieras, como la Cámara de Comercio de Barcelona, dado que el Gobierno tiene la voluntad de dar entrada al capital privado en AENA.
"He de escuchar a mucha gente, y de forma prioritaria a la Generalidad", ha remarcado Blanco ante un aforo formado principalmente por empresarios. Unas declaraciones que llegan horas después de que el presidente del Gobierno señalara en Moncloa, al defender el nuevo modelo de financiación autonómica que "es importante que Cataluña se sienta cómoda con la financiación".
El ministro Blanco ya ha pedido a sus servicios técnicos que le remitan los criterios sobre cómo hacer compatible que la Generalidad tenga una posición dominante en la gestión del Aeropuerto de Barcelona con "los intereses generales".
Se trata, ha subrayado Blanco, de una transferencia "compleja" que ha de dar lugar a un nuevo modelo de gestión aeroportuaria que resulte positiva "para el interés general de Cataluña".
De concretarse este nuevo modelo, el Gobierno daría así respuesta a una vieja reivindicación del ejecutivo catalán, que desde hace años reclama tener una participación decisiva en la gestión de El Prat.
Blanco ha señalado, en este sentido, que el Gobierno "tiene la determinación y la decisión política" de que la Generalidad tenga un papel clave en la gestión del aeródromo barcelonés, pese a que el Estatuto no le obliga a ello, a diferencia de lo que el texto establece en materia de financiación autonómica o del traspaso de la gestión de Cercanías.
También en materia de infraestructuras, Blanco ha anunciado que antes de finales de año presentará un plan de viabilidad del desarrollo y ejecución del denominado corredor ferroviario mediterráneo, que tendría que unir Andalucía con la frontera francesa con la alta velocidad.
El titular de Fomento ha comentado, a este respecto, que su intención es impulsar este eje desde la colaboración público-privada, necesaria para mantener la inversión en infraestructuras en tiempos de crisis como el actual.
"En este tiempo más que en ningún otro es necesario relanzar esta forma de cooperaciones", ha apuntado Blanco, que espera tener definido el trazado del corredor antes de 2010, lo que permitirá recuperar "el tiempo perdido", después de que en 2003 no se incluyera la obra en los ejes prioritarios de los corredores europeos.