Caja Duero y Caja España rompen las negociaciones para la fusión

La reunión de esta tarde en Tordesillas (Valladolid) apenas ha durado dos horas, ya que a las 19 horas se han levantado los diez negociadores que representan a las dos cajas sin acuerdo.

Los presidentes y los directores generales de Caja Duero y Caja España se reunirán mañana con responsables del Banco de España y de la Junta de Castilla y León, a propuesta de la entidad con sede en Salamanca, para dar a conocer los motivos de esta ruptura.

La reunión celebrada en Madrid con los sindicatos para concretar los aspectos laborales de la fusión ha concluido sin acuerdos y con decepción entre los representantes de los trabajadores, según han reconocido fuentes sindicales.

El encuentro ha servido para conocer las líneas generales del plan de viabilidad elaborado por la consultora KPMG, que supone la amortización de 846 puestos de trabajo de las dos cajas y el cierre de 253 oficinas.

Además, los sindicatos han mostrado su pesimismo por los planteamientos tan generales que ha mostrado la consultora, sin concretar aspectos tan esenciales para los sindicatos como los planes de prejubilaciones o la movilidad geográfica, según han señalado dichas fuentes.

Los dos principales sindicatos, UGT y CCOO, han reclamado datos concretos a KPMG, que se les entregará mañana, para poder concretar sus pretensiones.

Fuentes sindicales han señalado que desde esta empresa consultora se pretende que la movilidad geográfica sea voluntaria, como reclaman los representantes de los trabajadores, "aunque en el plan de viabilidad no se fijan los kilómetros ni las contraprestaciones".

Respecto a las prejubilaciones, el proyecto de fusión de Caja Duero y Caja España recoge que los trabajadores que se acojan a esta medida reciban el 75 por ciento de su sueldo y para aquellos empleados que superen la media del convenio, recibirán el 65 por ciento.