L D (EFE) Las provincias de Liaoning y Jilin, donde se han registrado uno y tres casos respectivamente, se encuentran en el noreste de China, en la zona conocida tradicionalmente como Manchuria. La extensión a estas zonas podría generar la alarma en Rusia, dado que estas provincias mantienen una intensa relación comercial con la parte asiática de ese país, y son frecuentemente visitadas por turistas rusos.
Zhejiang, donde se ha informado de otros tres casos, es una de las provincias más prósperas de China -base de la producción de seda y té- y es una de las primeras provincias de la costa oriental afectada por la enfermedad (aunque ya se habían registrado casos en Shangai). Otras provincias de la próspera zona, como Jiangsu o Shandong, no han registrado todavía casos.
Los familiares de los enfermos y otras personas cercanas han sido puestas en cuarentena para analizar si han contraído también el coronavirus causante de la enfermedad, señalaron responsables de Salud chinos. En la provincia de Jilin se ha informado también de dos casos sospechosos de SARS, lo que marca un cambio en la tendencia china a no informar de los casos "posibles", ya que hasta ahora sólo se daban las cifras de los confirmados.
Esta política fue duramente criticada por la Organización Mundial de la Salud, que la semana pasada advirtió que en Pekín podría haber cinco veces más casos de SARS de los que decía el Gobierno, algo que finalmente se ha confirmado. Tras las nuevas cifras dadas por Pekín este fin de semana, que parecen ser las primeras fiables de los últimos cinco meses, el número de muertos en todo el mundo por SARS se ha elevado a 198. La cifra de afectados por la enfermedad, que al parecer se originó en la provincia meridional china de Cantón, ronda ya las 4.000 personas en todo el mundo
Zhejiang, donde se ha informado de otros tres casos, es una de las provincias más prósperas de China -base de la producción de seda y té- y es una de las primeras provincias de la costa oriental afectada por la enfermedad (aunque ya se habían registrado casos en Shangai). Otras provincias de la próspera zona, como Jiangsu o Shandong, no han registrado todavía casos.
Los familiares de los enfermos y otras personas cercanas han sido puestas en cuarentena para analizar si han contraído también el coronavirus causante de la enfermedad, señalaron responsables de Salud chinos. En la provincia de Jilin se ha informado también de dos casos sospechosos de SARS, lo que marca un cambio en la tendencia china a no informar de los casos "posibles", ya que hasta ahora sólo se daban las cifras de los confirmados.
Esta política fue duramente criticada por la Organización Mundial de la Salud, que la semana pasada advirtió que en Pekín podría haber cinco veces más casos de SARS de los que decía el Gobierno, algo que finalmente se ha confirmado. Tras las nuevas cifras dadas por Pekín este fin de semana, que parecen ser las primeras fiables de los últimos cinco meses, el número de muertos en todo el mundo por SARS se ha elevado a 198. La cifra de afectados por la enfermedad, que al parecer se originó en la provincia meridional china de Cantón, ronda ya las 4.000 personas en todo el mundo