Estoy en desacuerdo en gran parte con este análisis económico: Porque desde mi punto de vista el dólar no se hundirá, más bien al contrario, puesto que el dólar vale en función de su relación con otras monedas y de su utilidad, el dólar es la moneda de pago del petróleo a día de hoy, además mientras en Estados Unidos ya ha bajado mucho el valor de los pisos y ha caído el consumo y han quebrado muchos Bancos en Europa siguen los precios de los pisos muy elevados, no han quebrado todavía apenas Bancos y no se ha limpiado la economía. Estamos copiando la gran crisis inmobiliaria y financiera de Japón de los años 90 que duró 10 añosde fuerte deflación y crecimientos nulos, pero con otros problemas distintos a los japoneses y estadounidenses: 1. Europa no tiene ya casi tejido productivo agrícola, la industria se está deslocalizando a gran velocidad y el turismo depende en gran medida del consumo interno. 2. Los impuestos en Europa son más altos que en USA o Japón y no se van a bajar porque hay un cuerpo de funcionarios y administraciones con millones de funcionarios consejerías, ministerios, etc que ningún partido político ni en la UE, ni en los gobiernos nacionales, locales y regionales va a osar cambiar y reducir de tamaño. 3. Europa es infinitamente más dependiente energéticamente que Estados Unidos. 4. La densidad de población de Europa es mucho más alta que en Estados Unidos y la llegada masiva de inmigrantes a Europa no ayuda a que mejore la presión sobre nuestros recursos naturales. 5. China y otros países emergentes harán que en pocos años se cierren las pocas industrias textiles, de calzado, etc que quedan en Europa, eso ya pasó en USA hace años. 6. Los fondos de inversión de USA financian muchos proyectos en Europa, si allí va mal se corta el grifo y Europa se anquilosa. 7. El control político en países europeos como España sobre entidades financieras como las Cajas de Ahorro contribuye a aumentar el riesgo financiero y el control político del Banco Central europeo es mayor que en USA con la FED así que aquí cuando reviente puede ser mucho peor. Podría poner muchas más cosas, pero simplemente con estas sobra, Europa reventará mucho más que Estados Unidos como ocurrió en los años 30 y la culpa no es sólo de los Bancos o de los consumidores, desde mi punto de vista tanto las políticas energéticas seguidas a ambos ladosdel Atlántico, como el establecimiento de acuerdos comerciales con países con tantísima población como China e India han desequilibrado nuestros países en favor de esos países emergentes y eso puede crear graves distorsiones en todos los ámbitos, aparte Europa en vez de aliarse con Rusia y conseguir así tener menos dependencia energética se ha puesto a suicidarse a reconocer Estados narcoterroristas musulmanes como Kosovo o queriendo meter a Turquía en la Unión Europeo y aceptando la llegada de millones de inmigrantes musulmanes a Europa, lo cual no nos está beneficiando para nada.

A mi alrededor cada día encuentro mayor número de gente que lo está pasando mal. Y algunos verdaderamente mal. Aunque muy pocos lo admiten. Todavía ayer un conocido (en un pasado reciente exitoso empresario de la construcción) me comentaba que "los precios no están bajando, ésto, bueno... un año de estabilización y vuelta a subir", "lo bueno no baja", "tampoco hay tanta oferta". Tan extraordinaria ceguera hizo que pronto se me encendiera una lucecita: aquel hombre tenía un montón de apartamentos en venta. Lo cierto es que muchas pequeñas y medianas empresas, y sobre todo propietarios individuales, no aceptan que en este sector en concreto existe un problema terrible de precios absolutamente inabordables. No comprenden que ya no existe la peseta. No aceptan que lo único que pueden hacer es tratar de salvar algo, aunque la inevitable pérdida sea tremenda. España es un país en el que tres mil euros suponen un sueldazo casi de privilegiado. En Barcelona no era posible encontrar un piso de baja calidad en un barrio mediocre por menos de 4.500 m2 metro cuadrado útil. Y todavía queda el agujero negro del problema finaciero. Así que ya me contaran.