La petición de las cajas parece bastante lógica, en orden a poder organizarse ordenadamente y sin caer en manos ajenas especuladoras en el corto plazo. Pero..., y ahí está el detalle, se encuentran con que a ZP le están mandando los deberes desde fuera (la Merkel, el Sarkozy) y puede que desde dentro ya que los grandes bancos parecen hambrientos de este jugoso bocado que pueden adquirir a precios de risa si le ofrecen lo suficiente al "iluminado" (y ya hemos podido experimentar el poder que ejercen sobre los socio-listos).