La agresión fue filmada por las cámaras de seguridad del Metro de la estación de Anagnina. En el vídeo se aprecia claramente cómo muchos transeúntes obviaron que la joven estaba tendida inerte en el suelo, y continuaban su marcha como si nada hubiera pasado. Sólo tras unos instantes que se hacen eternos, un viandante da la voz de alarma para atender a la mujer.
La grabación registra en primer lugar una fuerte discusión entre un joven y la mujer, una enfermera rumana de 32 años llamada Maricica Hahaianu. El agresor, de 20 años, lanzó un puñetazo a su cara después de esquivar un golpe de ella, que cayó fulminada al suelo tras el impacto. Según publica la prensa italiana y se hace eco 20 minutos, la joven permanece en coma en el hospital debido a las lesiones craneales que le provocó el golpe. Su pronóstico es reservado.
Sin embargo, más todavía que la brutal agresión, lo que ha llamado la atención de la opinión pública es la absoluta indiferencia con la que muchos de los transeúntes pasan de largo, pese a ver claramente el cuerpo de la joven tendido en el suelo de la estación de Anagnina.
El joven, Alessio Burtone, de tan sólo 20 años, ya ha sido detenido gracias a que un testigo de la agresión fue tras él una vez abandonó el lugar de los hechos. Burtone, que recogió sus pertenencias tras la agresión y se marchó del lugar de los hechos tras la misma, tiene otros antecedentes violentos. Aseguró a la Policía que no sabía lo que había hecho y que se ha mostrado "arrepentido", informa 20minutos. Los diversos partidos políticos italianos han condenado unánimemente la agresión.