LD (PULEVA Salud / con la colaboración de Dª Trinidad Aparicio Pérez . Psicóloga clínica. Psicóloga escolar. Centro de Psicología Alarcón. Granada)
Padres más permisivos
Lugar. Cada hijo ocupa un lugar especial en el contexto de la familia. Cada hijo tiene un lugar dentro de la familia y, muchas veces, el lugar que ocupa cada uno condiciona su carácter, su forma de ser y la educación que recibe.
Por lo general, los padres con sus hijos pequeños son más permisivos, son menos rígidos de lo que lo eran con los hermanos mayores. Suelen estar más relajados y disfrutan más de los cuidados y educación de su pequeño, debido a que poseen una experiencia y madurez que les libera de las tensiones, dudas y temores que tenían con los primeros hijos.
El pequeño les despierta una ternura especial, siente la necesidad de protegerlos constantemente, por lo que le toleran más cosas y se vuelven menos exigentes.
Sin embargo, los padres deberían tener especial cuidado en este aspecto, ser igual de exigentes que lo fueron con sus otros hijos y no descuidar la disciplina ni sobreprotegerlos, de lo contrario estarían haciendo de su hijo una persona débil sin capacidad para desenvolverse socialmente ni para ser independiente.
En ocasiones, los padres delegan el cuidado del pequeño a los demás hermanos. En momentos puntuales y si el otro hermano está de acuerdo, es positivo para la educación del hermano mayor, porque se le está dando oportunidades para desarrollar su responsabilidad y madurez.
Sin embargo, no es conveniente pedir la ayuda de los demás hermanos por sistema, los únicos obligados al cuidado de los hijos son los padres, los otros hermanos podrán de vez en cuando prestar su ayuda pero no de forma habitual.
Ventajas del pequeño de la casa
El pequeño de la casa sabe cómo conseguir todo lo que le apetece, desarrolla un carácter muy astuto y hábil y, sabe engatusar a todos los miembros de la familia para lograr lo que desea de ellos.
Con los hermanos mayores se aprende más de la vida, transmiten experiencias y conocimientos que el pequeño por su edad no poseen y que va aprendiendo a través de sus hermanos. Además, como comúnmente se dice ”los mayores van abriendo caminos”, dejan un camino más sencillo para el pequeño con respecto a sus padres, consiguiendo de ellos cosas que a sus hermanos mayores les supuso un gran esfuerzo.
Cuenta con el apoyo y el respaldo no sólo de sus padres sin también de sus hermanos, quienes podrán ayudarle, orientarle y enseñarle en gran cantidad de momentos en su vida. Tener un hermano mayor con quien jugar al fútbol o una hermana que te peine y maquille, es un ideal que la mayoría de los niños pequeños tienen.
En la mayoría de los casos, cuando hay gran diferencia de edad, los hermanos mayores son para él un referente y un modelo a imitar, alguien a quien admiran y con quien les gusta estar.
Inconvenientes del pequeño de la casa
Por lo general, suele estar muy protegido tanto por los padres como por los hermanos, lo que puede originarle dificultades para desenvolverse ante problemas cotidianos.
Sus hermanos y sus padres le solucionan todas las complicaciones que le puedan surgir, pudiendo llegar a descuidar la educación del pequeño de la casa en este sentido. No debemos facilitarle sus tareas u obligaciones dentro del hogar, ni resolverle sus problemas ni sus dudas, debemos permitir que sea él quien encuentre las soluciones a sus problemas y quien realice sus tareas sólo, sin la ayuda de nadie.
En caso contrario, estaríamos dificultando su desarrollo personal y limitándole su capacidad para resolver conflictos o situaciones embarazosas, incluso su capacidad para tomar cualquier tipo de decisiones.
Algunas veces, cuando los hermanos mayores están aburridos se divierten a costa suya, otras veces lo utilizan para que le haga favores. Esto puede dar lugar a cierta desconfianza y recelo hacia los hermanos mayores y si se abusa en exceso, este comportamiento puede llegar a mermar la seguridad y autoestima del pequeño de la casa.
Padres más permisivos
Lugar. Cada hijo ocupa un lugar especial en el contexto de la familia. Cada hijo tiene un lugar dentro de la familia y, muchas veces, el lugar que ocupa cada uno condiciona su carácter, su forma de ser y la educación que recibe.
Por lo general, los padres con sus hijos pequeños son más permisivos, son menos rígidos de lo que lo eran con los hermanos mayores. Suelen estar más relajados y disfrutan más de los cuidados y educación de su pequeño, debido a que poseen una experiencia y madurez que les libera de las tensiones, dudas y temores que tenían con los primeros hijos.
El pequeño les despierta una ternura especial, siente la necesidad de protegerlos constantemente, por lo que le toleran más cosas y se vuelven menos exigentes.
Sin embargo, los padres deberían tener especial cuidado en este aspecto, ser igual de exigentes que lo fueron con sus otros hijos y no descuidar la disciplina ni sobreprotegerlos, de lo contrario estarían haciendo de su hijo una persona débil sin capacidad para desenvolverse socialmente ni para ser independiente.
En ocasiones, los padres delegan el cuidado del pequeño a los demás hermanos. En momentos puntuales y si el otro hermano está de acuerdo, es positivo para la educación del hermano mayor, porque se le está dando oportunidades para desarrollar su responsabilidad y madurez.
Sin embargo, no es conveniente pedir la ayuda de los demás hermanos por sistema, los únicos obligados al cuidado de los hijos son los padres, los otros hermanos podrán de vez en cuando prestar su ayuda pero no de forma habitual.
Ventajas del pequeño de la casa
El pequeño de la casa sabe cómo conseguir todo lo que le apetece, desarrolla un carácter muy astuto y hábil y, sabe engatusar a todos los miembros de la familia para lograr lo que desea de ellos.
Con los hermanos mayores se aprende más de la vida, transmiten experiencias y conocimientos que el pequeño por su edad no poseen y que va aprendiendo a través de sus hermanos. Además, como comúnmente se dice ”los mayores van abriendo caminos”, dejan un camino más sencillo para el pequeño con respecto a sus padres, consiguiendo de ellos cosas que a sus hermanos mayores les supuso un gran esfuerzo.
Cuenta con el apoyo y el respaldo no sólo de sus padres sin también de sus hermanos, quienes podrán ayudarle, orientarle y enseñarle en gran cantidad de momentos en su vida. Tener un hermano mayor con quien jugar al fútbol o una hermana que te peine y maquille, es un ideal que la mayoría de los niños pequeños tienen.
En la mayoría de los casos, cuando hay gran diferencia de edad, los hermanos mayores son para él un referente y un modelo a imitar, alguien a quien admiran y con quien les gusta estar.
Inconvenientes del pequeño de la casa
Por lo general, suele estar muy protegido tanto por los padres como por los hermanos, lo que puede originarle dificultades para desenvolverse ante problemas cotidianos.
Sus hermanos y sus padres le solucionan todas las complicaciones que le puedan surgir, pudiendo llegar a descuidar la educación del pequeño de la casa en este sentido. No debemos facilitarle sus tareas u obligaciones dentro del hogar, ni resolverle sus problemas ni sus dudas, debemos permitir que sea él quien encuentre las soluciones a sus problemas y quien realice sus tareas sólo, sin la ayuda de nadie.
En caso contrario, estaríamos dificultando su desarrollo personal y limitándole su capacidad para resolver conflictos o situaciones embarazosas, incluso su capacidad para tomar cualquier tipo de decisiones.
Algunas veces, cuando los hermanos mayores están aburridos se divierten a costa suya, otras veces lo utilizan para que le haga favores. Esto puede dar lugar a cierta desconfianza y recelo hacia los hermanos mayores y si se abusa en exceso, este comportamiento puede llegar a mermar la seguridad y autoestima del pequeño de la casa.

Ser el pequeño de la casa tiene sus ventajas y sus inconvenientes. Los padres deben tener especial cuidado con no sobreprotegerlos ni convertirlos en un niño mimado o en un tirano.